2 de agosto de 2025
El ministro de Economía y Finanzas, Carlos Fernández Valdovinos, pidió reconocer a este Gobierno como “reformista”, cuando justamente el principal cuestionamiento que se le puede hacer a esta administración es que, en dos años de mandato, no ha generado prácticamente ningún cambio estructural. El paquete de proyectos de ley que acaba de presentar al Congreso tiene que ver con asuntos de cierta importancia, pero secundarios. Los verdaderos cuellos de botella del desarrollo nacional y los grandes factores de riesgo del país no solo continúan sin resolverse, sino que se han agravado.
El exsenador Carlos Mateo Balmelli aseguró anoche que se aproxima una crisis social profunda, con violencias que pueden resultar catastróficas si quienes gobiernan el país persisten en la política tradicional en el que priman el clientelismo, la prebenda y la corrupción. Fue durante una charla en Itauguá.
Los últimos gobiernos han elaborado distintos planes de desarrollo nacional, que sintetizaban visiones similares pero con abordajes un poco diferentes. El plan denominado Políticas Públicas para el Desarrollo Social 2010-2020, conocido también como “Paraguay para todos y todas”, elaborado por el gabinete social durante el gobierno de Fernando Lugo, el plan estratégico económico y social, preparado por el Ministerio de Hacienda, también durante la era Lugo, y el Plan Nacional de Desarrollo, recientemente presentado por la Secretaría Técnica de Planificación, no hacen referencia explícita a la cuestión regional o espacial. Tampoco presentan orientaciones o lineamientos básicos para las distintas áreas del país.
Hemos incursionado en esta serie con ideas concretas que un estadista podría capitalizar para lograr el desarrollo nacional. El que lo haga podría convertir sus dotes de oro en el metal más noble que el hombre ha establecido para su inmortalidad, el bronce. Este aparente mal negocio es la metáfora del reconocimiento humano.
¿Por qué se tiene que hacer la reforma agraria? ¿Por qué fracasaron los intentos de la reforma agraria en distintos gobiernos sucesivos hasta el presente? ¿Qué fórmula diferente hay que aplicar? En este artículo trataremos de responder a estas preguntas a la luz de un criterio netamente técnico, a pesar de que la solución del problema de la tierra pasa irremediablemente por lo “político”, porque golpea al grupo más poderoso con mucho poder económico/político.
La planificación es una herramienta de gestión para cualquier empresa o Gobierno. Como los recursos son limitados y las necesidades de la sociedad son mayores que dichos recursos –materiales y humanos– se debe priorizar las necesidades y asignar recursos a dichas prioridades para alcanzar los objetivos nacionales.