El Ministerio de Industria y Comercio (MIC) y la Cámara Paraguaya de Procesadores de Oleaginosas y Cereales (Cappro) trabajan por la instalación de una mesa de trabajo que abordará la crisis que enfrentan las aceiteras, cuyas condiciones de competitividad se han deteriorado debido a la falta de consolidación de una política industrial. El gremio reclama un tratamiento fiscal equitativo, además de la implementación de un régimen de admisión temporaria para importar soja.
El año que está culminando ha sido complicado para las industrias aceiteras en Paraguay. Algunas plantas se vieron obligadas a reducir el procesamiento y a exportar granos debido a distorsiones del mercado por una medida de Argentina y la falta de políticas claras del Gobierno para el sector, argumentó ayer el titular del gremio Cappro, Juan Tizado.
La nueva tarifa de electricidad implementada desde principios de marzo de este año por parte de la ANDE tendrá un impacto económico importante en los presupuestos de las industrias aceiteras este año, en cifras que se estiman en unos US$ 3 millones para un total de nueve fábricas, según Juan Tizado, el nuevo presidente de Cappro, principal gremio del sector.
La molienda de soja en las industrias aceiteras durante el mes de enero de este año disminuyó en volumen en una proporción del 45% en comparación con el mismo periodo del año pasado, según estadísticas de la Cámara Paraguaya de Procesadores de Oleaginosas y Cereales (Cappro). El gremio informó que el mes pasado fueron procesadas unas 96.599 toneladas de soja contra 175.834 toneladas del mismo mes del 2016.
Un llamado de auxilio para salvar inversiones de más de US$ 12 millones en industrias aceiteras del coco o mbocayá lanzó el especialista del sector, Ing. Carlos Loup. El problema es la falta de materia prima, por lo que se plantea como solución la voluntad y decisión del Gobierno para impulsar el cultivo del rubro en pequeñas fincas.
Los márgenes negativos que hoy tienen las industrias aceiteras harán retroceder los planes de procesamiento de soja que se tenían para este año y están obligando a las firmas optar por la exportación de granos en estado natural, dijo ayer el titular de Cappro, Enrique Ohaco, durante una convocatoria de prensa en su local. Detalló que de la industrialización del 45% de la soja cosechada en el país, lograda en año pasado, se caería posiblemente hasta cerca del 38% en este periodo.