Un inodoro modesto adquirido en una liquidación. Su única inteligencia consiste en responder dócilmente a la cadena o al botón de vertido del agua (si hay agua). Sentado en él, cual El Pensador de Rodin, el paraguayo, estreñido y seco, trata de entender cómo sobrevive el Paraguay al saqueo insaciable del cada vez más poderoso bandidaje vernáculo.
Hoy, al cumplirse otro aniversario del sangriento 12 de abril de 1877, este artículo recuerda su impronta en la historia y en la literatura, en especial en la del recordado escritor guaireño Helio Vera.
“En busca del hueso perdido” de Helio Vera presenta las leyes del mbarete, el ñembotavy y el vai vai. El autor muestra que más allá de las polcas, el idioma guaraní y los seres mitológicos, la cultura paraguaya tiene características que la hacen única.
“En busca del hueso perdido”, de Helio Vera, es una de las obras principales de las letras paraguayas, una obra que escribió para reirse de la supuesta profundidad que tenían ciertos “analistas”. Ha sido un éxito como demuestra las más de 15 ediciones que tuvo desde 1988.
Aquellas personas que aún no lo han leído, tendrán mañana domingo la oportunidad de hacerse de un ejemplar de “En busca del hueso perdido”, el ensayo de Helio Vera en el que el referido autor nos legó un tratado de paraguayología con la impronta de su humor y de su agudeza extrema.
“En busca del hueso perdido”, de Helio Vera, es una de las obras más difundidas y célebres de las letras paraguayas. Hasta hoy sigue siendo material de lectura imperdible para conocer mejor el Paraguay.