Día Mundial de la Fertilidad: ¿hasta cuándo podemos posponer ser madres o padres?

Cada 4 de junio se celebra el Día Mundial de la Fertilidad, una fecha que invita a reflexionar sobre las posibilidades —y los límites— que ofrece hoy la ciencia para formar una familia. En tiempos donde cada vez más personas eligen postergar la maternidad o la paternidad, la gran pregunta sigue siendo la misma: ¿hasta cuándo es médicamente posible?

Ultrasonido.
Ultrasonido.Shutterstock

Las respuestas no son absolutas, pero la medicina reproductiva ha avanzado lo suficiente como para ofrecer nuevas opciones, desde la criopreservación de óvulos hasta la fecundación in vitro y el prometedor —y polémico— desarrollo de úteros artificiales.

Criopreservar óvulos: una pausa biológica

Congelar óvulos no es ciencia ficción, sino una realidad cada vez más accesible. Este procedimiento permite conservar óvulos en su mejor estado para usarlos más adelante, algo especialmente útil para quienes desean posponer la maternidad sin sacrificar la calidad biológica.

El proceso comienza con una estimulación ovárica para obtener varios óvulos, que luego se congelan a temperaturas ultra bajas.

Aunque la técnica no garantiza un embarazo futuro, sí aumenta las posibilidades de concebir con óvulos propios cuando el reloj biológico avanza.

¿Cuál es el mejor momento para congelar óvulos?

La ciencia es clara: antes de los 35 años es el momento ideal. A esa edad, tanto la cantidad como la calidad de los óvulos son óptimas.

Después de los 35, la técnica sigue siendo viable, pero con menores tasas de éxito. Por eso, muchas clínicas recomiendan asesoramiento personalizado antes de tomar una decisión.

Fecundación in vitro: cuando el cuerpo necesita ayuda

Fertilización in vitro, imagen ilustrativa.
Fertilización in vitro, imagen ilustrativa.

La fecundación in vitro (FIV) es una de las técnicas más utilizadas para superar problemas de fertilidad. Consiste en fecundar el óvulo con el esperma en laboratorio y luego transferir el embrión al útero.

La tecnología ha mejorado tanto que hoy se complementa con técnicas como el diagnóstico genético preimplantacional, que ayuda a seleccionar embriones más sanos.

Pero, ¿qué factores influyen en el éxito de la FIV? La edad sigue siendo clave. Las mujeres menores de 35 tienen tasas de éxito significativamente más altas que las de 40 o más. Pero también influyen otros factores: la salud general, la calidad de los embriones y el estado del útero.

El futuro ya llegó: ¿úteros artificiales?

Parece sacado de una novela de ciencia ficción, pero ya se están desarrollando úteros artificiales capaces de gestar embriones humanos fuera del cuerpo femenino.

Aunque aún en fase experimental, estos dispositivos podrían representar una revolución en reproducción asistida, especialmente para casos en los que el embarazo representa un riesgo elevado.

Lo que no se puede congelar: emociones y decisiones éticas

Más allá de la tecnología, postergar la maternidad o la paternidad implica desafíos emocionales y éticos. La ansiedad por los resultados, la presión social, el costo económico y la incertidumbre sobre el futuro son factores que impactan directamente en la experiencia.

Por eso, es esencial contar con acompañamiento emocional y asesoramiento profesional antes, durante y después de cualquier tratamiento.

Posponer ser madre o padre ya no es una utopía científica, pero tampoco una decisión que deba tomarse a la ligera. En este Día Mundial de la Fertilidad, el mejor mensaje es el de la información responsable: conocer nuestras opciones, entender los límites y decidir desde un lugar de conciencia y libertad.

Porque más allá del cuándo, lo más importante es el cómo y el para qué.

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