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ABC Color recorrió algunos de los puntos del departamento de Alto Paraná, en donde, en el 2015, la gobernación local, en ese entonces a cargo de Justo Zacarías, instaló los gallineros.
Lo que el equipo periodístico encontró es que, en algunos lugares, los gallineros ya no existen como tales, ya que las gallinas que tenían que entregarse después de construidos estos corrales, jamás llegaron. Eso ocurrió, por ejemplo, en la comunidad indígena de Puerto Giménez, Ybyra Mora, en Presidente Franco.
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Nelson Duarte Barreto, líder de esta comunidad, indicó a ABC Color que esperaron durante mucho tiempo la llegada de las gallinas, para darle utilidad al corral. Sin embargo, como la gobernación nunca trajo las aves, decidió utilizar la estructura para convertirla en su propia vivienda.
El gallinero tenía que tener, según las especificaciones técnicas que figuran en el contrato, cimiento, mampostería, marcos de madera, contrapiso y piso, techos de chapa, puertas con malla de tejidos, malla de tejidos de alambre, horcones y alfajías. Sin embargo, hoy se convirtió todo eso en una casa precaria, con maderas clavadas entre sí.
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Andrés Villalba, de la comunidad indígena Carrería Cue, también de Presidente Franco, dijo que esperaron durante años las gallinas para que el gallinero tenga sentido. “Mucho tiempo no se utilizó, entonces convertimos en una sede, para la comunidad”, explicó en guaraní, Villalba.
Sin uso y casa de coatíes
En la colonia Ykua Porã (ex Chino Kue), las Productoras Agropecuarias San Juan, del distrito de Itakyry, también tenían que tener sus gallineros, pero algunas ya desecharon el proyecto.
En el caso de Vidalina Cañiza, una de las productoras, dijo que el gallinero le sirvió un par de años, pero que después los postes de madera se pudrieron, por lo que procedió a derrumbar todo y darle otra utilidad al techo y a los alambrados. Lo concreto es que el gallinero, en el caso de Cañiza, hoy es un rejunte de escombros y yuyos.
Gloria Alegre, otra de las productoras, dijo que decidió destinar el costoso gallinero en un corral para su coatí. Dijo que ya no pudo tener gallinas y entonces decidió darle otro uso al gallinero.
En el contrato firmado con la empresa Aria Servicios, de Mario Rubén Aquino Insfrán, se especifica que se tenían que construir 72 gallineros.
Sin embargo, denuncias de concejales departamentales indicaron que se pudieron contabilizar solo 50 corrales terminados.
El monto desembolsado fue de G. 598.900.000.
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En 2018, el entonces concejal departamental y ahora diputado por Cruzada Nacional, Miguel Martínez, presentó una denuncia formal en relación a los “gallineros de oro” ante el Ministerio Público. La Fiscalía nunca avanzó en la investigación.
Votó a favor del despojo a Itaipú
Justo Zacarías (ANR-HC), futuro director de Itaipú, fue uno de los principales impulsores de una ley que pretendía despojar al Estado paraguayo de unos US$ 940 millones para otorgarlos a una dudosa lista de 16.000 supuestos “exobreros” y contratistas de la binacional. La iniciativa finalmente fue vetada por el Poder Ejecutivo. Estando en la Cámara de Diputados, Justo Zacarías votó a favor de que se rifara ese dineral a favor de una lista de supuestos beneficiarios, plagada de irregularidades.