El presidente Santiago Peña declaró hoy jueves a las facciones criminales Primer Comando da Capital (PCC) y Comando Vermelho (CV) como organizaciones terroristas internacionales, mediante el Decreto N.º 4857.
Esta declaración se acomoda en una política de Estado que, según el documento, reafirma el compromiso del país con la democracia, el Estado de derecho y la defensa de la soberanía nacional.
La medida llega pocos días después de los enfrentamientos en Río de Janeiro, donde más de 130 presuntos miembros del Comando Vermelho murieron durante un operativo de la policía estatal brasileña. Las autoridades del vecino país sostienen que se trató de una de las intervenciones más letales contra el crimen organizado en los últimos años.
Ante el caso, se reforzó los controles fronterizos para evitar el ingreso de integrantes de los grupos criminales. Ambas organizaciones criminales tienen una fuerte presencia en el eje fronterizo entre Paraguay y Brasil, donde mantienen redes de tráfico de drogas, armas y lavado de dinero.
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El PCC opera desde hace más de una década en territorio paraguayo, con antecedentes de motines en cárceles y ejecuciones, mientras que el Comando Vermelho también amplio su influencia en los últimos años, particularmente en la zona norte del país.
El decreto de Peña menciona expresamente que la designación responde a la necesidad de fortalecer la cooperación en materia de seguridad y justicia y prevenir la expansión de estos grupos en la región.
Otras declaraciones de terroristas
El documento recuerda antecedentes de otras organizaciones ya declaradas como terroristas por el Gobierno paraguayo, entre ellas Muslim Brotherhood, Hezbolá, el Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) y el Cártel de los Soles, vinculadas a actividades de narcotráfico y financiamiento ilícito.
Según el Ejecutivo, la decisión permitirá juzgar a los integrantes de estas bandas bajo un marco penal más severo, con penas elevadas y mayor cooperación internacional para su captura.
