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El pasado viernes 10 de marzo, en la ciudad de Santa Cruz, Bolivia, el presidente de la Administración Nacional de Electricidad, Félix Sosa, y la presidenta ejecutiva del Banco de Desarrollo (FONPLATA), Luciana Botafogo, suscribieron un contrato de préstamo para la construcción de la Línea de Transmisión 220 kV Villa Hayes – Villa Real – Pozo Colorado – Loma Plata y la construcción de la Subestación Pozo Colorado en 220 kV, en la Región Occidental del Paraguay.
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El proyecto implica una inversión total de US$ 126 millones, de los cuales US$ 45 millones serán financiados por Fonplata, US$ 75 millones por la KfW (Banco de Desarrollo Alemán) y US$ 6 millones por la ANDE con el fuerte objetivo de aumentar la capacidad del Sistema de Transmisión Norte y Oeste del país, así como del Sistema de Distribución del Bajo Chaco paraguayo.
Puntualmente, se prevé la construcción de la línea de transmisión de 220 kV señalada, la Subestación Pozo Colorado y la construcción de cuatro nuevos alimentadores, a fin de “acompañar el crecimiento de la demanda proyectada de la zona y garantizar la provisión de energía eléctrica con confiabilidad y seguridad, contribuyendo de esa manera al desarrollo socioeconómico de la población”.
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En la ocasión, Félix Sosa destacó que el apoyo por parte de Fonplata para el fortalecimiento de la infraestructura de transmisión para la región del Chaco paraguayo es fundamental para el desarrollo productivo y sostenible de la agricultura de la zona. Resaltó además que gracias al apoyo de dicho banco se estará duplicando la capacidad de transmisión hacia esa zona del país.
Por su parte, Botafogo señaló el compromiso que desde ANDE se tiene para el desarrollo del pueblo paraguayo y agregó que es deseo de Fonplata acompañar el continuo desarrollo de Plan Maestro de la ANDE, ya que se considera esencial el acceso a la energía eléctrica como forma de mejorar la calidad de vida.
Largo reclamo energético del Chaco
El desarrollo de la Región Occidental enfrentó desde el principio desafíos titánicos y son varias décadas las cuales los habitantes de la región llevan reclamando una inversión mayor en cuanto a la energía eléctrica, ya que de ello depende el florecimiento de las industrias en la zona.
Tras varias décadas de evolución, tanto económica como demográfica, el reto según el sector productivo y demográfico sigue siendo garantizar la provisión de energía para sostener el boom económico en el que se encuentra el Chaco.
El Chaco se muestra con gran potencial de desarrollo y la inversión en el rubro energético, según los productores, debe acompañar, la demanda de energía creciente también en las áreas urbanas con el aumento del poder adquisitivo y de la reafirmación del sector agroindustrial, rubro principal de todo el departamento, en donde están instaladas plantas de lácteos y frigoríficos, además de desmotadoras y sistemas de riego relacionados a la horticultura y la ganadería