En 2024, en un hecho que ganó notoriedad, cuando un grupo de pobladores marchó a pie desde sus comunidades hasta San Juan de Ñeembucú, atravesando zonas inundadas, como medida de protesta para exigir al gobernador de Ñeembucú, Víctor Hugo Fornerón (ANR), la construcción urgente de un terraplén enripiado como solución provisoria mientras se gestiona la tan ansiada pavimentación asfáltica.
Estas comunidades tienen un perfil productivo relevante: se trata de una zona agrícola y ganadera, que además cuenta con atractivo turístico, gracias a la costa y playa del río Tebicuary en Ciervo Blanco, frecuentada por visitantes en época de verano.
Sin embargo, el mal estado del camino representa un obstáculo constante para el desarrollo económico y social del área.
El diputado Diosnel Aguilera (PLRA), oriundo de la zona, criticó a las autoridades del MOPC por atrasar los trabajos de construcción de puente Estero Camba y la realización del terraplén tipo ripio en la zona.
“Son apenas 13 km desde la ruta que une San Juan de Ñeembucú hasta Laguna Itá, pero un tramo suficientemente complicado de transitar en épocas de llUvias" señaló.
“Otros 15 desde Laguna Ita hasta Ciervo Blanco donde hemos solicitado al MOPC la reconstrucción del puente, pero no logran terminar hasta ahora. Estas son comunidades postergadas por décadas” indicó el legislador.
Último incidente: vuelco de transganado
Ayer, martes 6 de mayo de 2025, un nuevo incidente puso en evidencia la urgencia de intervenir el camino. A las 10:00 horas, en la compañía Otazú, volcó una carreta acoplada a un camión de gran porte, cargado con ganado vacuno.
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Según el informe de la Subcomisaría jurisdiccional, el camión marca Volvo, de color blanco y matrícula ANV 933, conducido por el señor Mariano González, (52) años oriundo de la ciudad de Limpio, se desplazaba por el deteriorado tramo cuando, al llegar al puente, la carreta de color rojo con blanco (chapa BAZ 725) perdió estabilidad debido al barro y volcó.
Afortunadamente, el conductor resultó ileso y no se registraron animales muertos, pero el hecho refleja una vez más el peligro que representa circular por estos caminos en condiciones deplorables.
Los pobladores reiteran su pedido a las autoridades nacionales y departamentales para que se dé respuesta definitiva a una demanda histórica que afecta no solo a la conectividad, sino a la seguridad, la producción y el turismo de esta importante zona de Ñeembucú.