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Galeano Grassi aseguró que a diario personas de todo el país se organizan para protestar contra el Gobierno debido a la frustración generalizada que se siente por la mala gestión del Gobierno durante esta pandemia. Afirmó que, contrario a lo que afirman desde el Gobierno, no hay ninguna ideología ni líderes detrás.
Resaltó que eso es evidente en cada protesta, pues no se ven discursos ideológicos ni líderes organizando, sino que son personas de todas las edades que se reúnen para expresar su “genuina frustración. Es una reunión totalmente espontánea por parte de miles de ciudadanos”, señaló.
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El representante gastronómico hizo énfasis en que se está instalando la cultura del “after office revolucionario” debido a que la gente sale de su puesto de trabajo y va directo a los puntos de protesta a diario y es evidente que no va perdiendo fuerza, pues cada día se llenan las calles.
“Están muy confiados en que van a poder estirar, dejar que pase el tiempo. Creo que están leyendo en forma equivocada porque la gente está muy decidida. Todas las noches van a seguir hasta que se vaya Mario Abdo. La gente está decidida, vi mucha gente frustrada, vi a padres de familia con frustración realmente genuina. A esa gente no hay cuento que le vendas”, evaluó.
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Saliendo adelante, “pese al Gobierno”
Por otra parte, resaltó que el sector gastronómico está reactivándose muy positivamente gracias a que la ciudadanía ya está cansada del encierro y de esa manera se están salvando muchos puestos de trabajo. Indicó que, de tener apenas un movimiento del 15% durante el inicio de la pandemia, ahora están en un orden del 70%
“Siguen siendo números bajos, pero estamos mejor. La gente busca salir, no hay nada que hacer. Estamos sobreviviendo esta pandemia a pesar de este Gobierno y nos hemos educado bastante bien (…) Realmente nos cuidamos y estamos aguantando la pandemia con números bajos gracias a la colaboración por parte de la ciudadanía”, evaluó.
En otro momento, admitió su preocupación por la situación actual de la pandemia, el alto número de contagios y de muertes y, sobre todo, la mala gestión sanitaria para hacer frente a las internaciones y adquirir las vacunas.
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No obstante, admitió que las condiciones no están dadas para un retroceso de fases porque no hay dinero para mandar a tres millones de personas a sus casas. “Pero, por otro lado, te sentás y pensás que este Gobierno es tan inútil para no comprar vacunas. Nos encontramos como el último país de Sudamérica con relación a vacunas… Pero no podemos retroceder en fases; tenemos que cuidarnos más que nunca y ser responsables, no queda de otra. Pero este Gobierno debe pagar. Ya no hay confianza… y por eso las movilizaciones”, sentenció.
Ayer se cumplieron seis días de manifestaciones consecutivas en el microcentro de Asunción. El viernes, durante la primera jornada, se registraron represiones policiales con numerosos heridos debido a la presencia de “infiltrados”, barrabravas que acudieron para incidentar.
Desde entonces, todas las tardes las personas se reúnen en varias cabeceras departamentales, frente a la casa del expresidente Horacio Cartes y, principalmente, en 14 de Mayo y El Paraguayo Independiente.
Con carteles alusivos a la corrupción y la mala gestión, exigen el juicio político para Mario Abdo Benítez y Hugo Velázquez.
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Cabe resaltar que el estallido social se fue originando debido al cúmulo de hechos de corrupción y, sobre todo, la falta de fármacos para los pacientes internados por COVID-19. Esa situación llevó a la quiebra de numerosas familias, quienes debían endeudarse y organizar campañas de recaudación de fondos para poder salvar a sus seres queridos.
El Gobierno ya realizó varios cambios, empezando por el propio ministro de Salud, Julio Mazzoleni, y siguiendo con otros referentes como Eduardo Petta y Juan Ernesto Villamayor. No obstante, la ciudadanía considera que son solo “movimientos en el tablero” que no solucionarán las cosas, debido a que los nuevos ministros son nuevamente personas que ya formaban parte del Gobierno y anteriormente ocupaban otros cargos.
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