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El sábado, un grupo de manifestantes pintó con aerosol las paredes del Panteón de los Héroes y Oratorio de la Virgen de la Asunción, además de quemar una bandera paraguaya. Esto se hizo en protesta por la muerte de dos niñas durante el enfrentamiento entre la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) y la banda criminal EPP.
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En el video se puede observar que todo esto fue realizado frente a la atenta mirada de agentes de la Policía Nacional, que nada hicieron para proteger uno de los patrimonios históricos más emblemáticos de Asunción.
Al respecto, el fiscal Ángel Ramírez, a cargo del caso, respondió que ahora se está abriendo un sumario administrativo contra estos policías. “Ahí se analiza si pueden o no tener responsabilidad penal”, aseveró.
Además, sostuvo que “habría que ver si la Policía recibió la orden para no intervenir”. En ese punto, cabe resaltar que ayer el jefe de la Comisaría Tercera de Asunción, comisario principal Carlos López, indicó que las manifestantes buscaban provocar a los agentes para que estos reaccionen y así poder denunciarlos posteriormente.
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El patrimonio histórico fue encargado por el Mcal. Francisco Solano López en 1863 en honor a la santa patrona de la capital, la Virgen de la Asunción. Las obras empezaron en 1864, pero se vieron interrumpidas por la Guerra contra la Triple Alianza (1865-1870). Tras sobrevivir a dos contiendas, incluyendo la mencionada y la Guerra del Chaco (1932-1935), el monumento fue terminado en 1936, para luego convertirse también en Panteón de los Héroes.
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Hace un par de años se terminó una restauración, que tuvo varias etapas y que costó al Estado paraguayo una inversión total de G. 12.000 millones, trabajo tras el cual la estructura volvió a abrir sus puertas al público.
En su interior descansan los restos del Mcal. Francisco Solano López, el Soldado Desconocido, Antonio Tomás Yegros, José Eduvigis Díaz, Eligio Ayala, Eusebio Ayala, Bernardino Caballero, Emiliano Rivarola Fernández y niños mártires de Acosta Ñu.