A medida que pasaron los meses de pandemia, muchos hábitos se alteraron y el stress estuvo a la orden del día, así que hablar de insomnio asociado a la pandemia del coronavirus era cuestión de tiempo. Lo bautizaron “coronasomnia” y para la psicología no está tipificado como un trastorno precisamente. Pero si está asociado a un trastorno del sueño que debe ser tomado muy en cuenta: El insomnio.

El programa Tal Como Es de la 98.5 ABC FM contactó con el psicólogo Ivan López para que reseñe sobre el tema. El profesional explicó cómo los cambios de hábito y los malos hábitos afectan a nuestro buen dormir.

Ciberesclavitud

“Hoy en día se desdibujaron los horarios. Ves a la gente trabajando fuera de horario, respondiendo correos toda la noche y mensajes en el teléfono durante las 24 horas. Así no se puede descansar. Yo llamo a eso ciberesclavitud” comentó el Psicólogo.

Si bien trabajar en casa para muchos es un ideal, para los que lo llevaron a la práctica y quizás, sin herramientas correctas o reglas bien definidas, la experiencia del teletrabajo se volvió una pesadilla: “Al quedarnos encerrados y trabajar desde la casa, además los jefes seguían exigiendo y uno estaba con la mentalidad de: ´hay que producir´ y eso, de manera sostenida, no es sano. Al difuminarse esos límites del horario de trabajo, enseguida los gobiernos y empresas empezaron a aplicar protocolos para respetar los horarios con el objetivo de cuidar la salud mental de sus empleados”.

Higiene del Sueño

También nos comentó acerca de la importancia de mantener una correcta higiene del sueño “Hay que cuidar y tener buenos hábitos de sueño: ¿qué pasa si no dormimos bien? Podemos desarrollar en algún grado irritabilidad, desmotivación, desgano, disminución del apetito sexual, cansancio contante. Estos son signos que quizás podríamos estar experimentando alguna alteración o un trastorno del sueño”.

Como en muchos casos lo físico y psíquico, van de la mano. De esta manera es importante y ayuda a mantener una buena salud mental tanto comer bien y dormir bien. Esto implica que debemos establecer hábitos sanos en cuanto al horario y al ambiente donde nos alimentamos y también donde destinamos el espacio para un correcto descanso. Remitiéndonos al tema del sueño, según el psicólogo este es momento de relajarnos y de recargar baterías. “De acuerdo a como vamos pasando las etapas evolutivas tenemos menos capacidad de dormir, los niñitos duermen entre 15-12hs, un niño más grande duerme 10-8 horas, los adolescentes y adultos también. En la vejez cuesta aun mas mantener el horario de sueño y si sumamos a eso el stress, se puede complicar. Por eso es importante establecer buenos hábitos”, expresó López.

Establecer hábitos

Tener en cuenta los horarios y el espacio que destinamos al descanso, quizás sean las mayores observaciones a la hora de apuntar los hábitos para una buena higiene del sueño. Además:

-Establecer horario de 8 horas de sueño (adultos).

-La habitación de descanso solo debe estar destinada a ello.

-Deshacerse de la tv, la notebook, celulares o equipos electrónicos varios a la hora de dormir.

-Nunca llevar el trabajo a la cama.

-Evitar ver tv o apps de streaming en el cuarto y en la cama (terminamos viendo series hasta las 3 de la mañana y no conciliamos el sueño).

-No es recomendable acostumbrarse a la ingesta de bebidas alcohólicas antes de dormir. Aunque parezca inocente una copa de vino o una lata de cerveza, estos pueden condicionar a futuro, el sueño de una persona.

-Hacer actividad física. También los ejercicios de respiración ayudan.

-Evitar la automedicación.

De tener en cuenta todas estas recomendaciones y aun continuáramos experimentando episodios de insomnio es importante acudir a especialistas, a fin de ir descartando las posibles causas que están impidiendo una correcta conciliación del sueño “Es importante conocer el motivo del porqué esta persona no está pudiendo dormir, además del aspecto psicológico, como experimentar niveles de ansiedad. Puede ser un factos físico o algo biológico: un dolor, una enfermedad cardiovascular o cambios hormonales, son muy comunes también. En síntesis debemos buscar la causa y sobre todo: evitar automedicarse”. finalizó el psicólogo.

Si te encontraste reflejado/a en esta nota no esperes a tratar esa falta de sueño y ya sea; esos malos hábitos, tu jefe o el vecino con la música a todo volumen alguno de “los puntos” a corregir en tu vida, tomá una decisión y llevala acabo. Que la expresión “duerme como un bebé” sea tu norte, el bienestar: tu bandera y a torrar...