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Viernes 1º de mayo de 2020. Por primera vez, el Día del Obrero no tendrá celebraciones con asados, música y aplausos. Sin posibilidad de aglomeraciones, la pandemia obliga a confinamientos que afectan el trabajo de los artistas. Suenan sus canciones en redes sociales, programas de radio y televisión, pero no generan ingresos para afrontar la vida cotidiana. Como inspirados versos de un “purahei jahe’o”, aquí, en coro, exponen lo que sienten.
Marcelo Rojas (arpista). “Es una situación complicada. Ni esperábamos esto que empezó el 10 de marzo. Sin ingresos, trato de reinventarme dictando clases de manera virtual a quienes me lo solicitan. Hay que buscarle el lado positivo a todo esto, nos permite encerrarnos con el instrumento, practicar, crear y brindar algunos videos también a nuestro público, de la manera posible”.
Lourdes Sotto (cantante). “Esta pandemia hizo que me suspendieran varios contratos que estaban marcados para este año. Mis ingresos han sido golpeados terriblemente al depender exclusivamente de la música. Tenemos fechas cruciales de muchos shows que van a pasar de largo: Día de la Independencia y Día de la madre. Estoy ofreciendo a mis clientes serenatas desde mi casa, con música paraguaya o las canciones románticas de Rocío Durcal a través de videollamadas o videos”.
Sergio Cuquejo (director de orquesta). “Desde que empezamos el aislamiento, hace como 50 días, fue un balde de agua fría para los trabajadores independientes, artistas, músicos y todo lo derivado al arte. Tuvimos que cancelar un Concierto Sinfónico que involucraba a artistas internacionales que quedaron varados en Asunción. Ver mi estudio de grabación vacío son signos de que el mundo ha cambiado! Y me di cuenta que es momento de reflexionar y de pensar, reinventarnos!”.
Favio Chávez (director de la Orquesta de Instrumentos Reciclados de Cateura). “Después del primer día de clases donde fueron unos 400 alumnos, tuvimos que suspender las clases de nuestra escuelita de música. Del mismo modo, hemos suspendido varías presentaciones en Paraguay así como varios viajes y giras por el exterior. Considerando que la Orquesta no recibe apoyo ni aportes del Estado y que estas actividades constituyen nuestro principal medio de generar recursos, las restricciones tienen un alto impacto para nosotros. Sin embargo gracias al compromiso de la Asociación de Padres hemos podido coordinar planes de contingencia que nos permiten asistir a las familias más necesitadas de nuestros alumnos”.
Jazmín Díaz (cantante). “Particularmente me afecta mucho en lo económico porque como todo artista amamos lo que hacemos y lo mejor que te puede pasar es que te paguen por hacer lo que te gusta. Lastimosamente esta pandemia nos hace mucho mal en todos los sentidos y más aún si vivimos netamente del trabajo artístico”.
Riolo Alvarenga, (baterista). “Esta enfermedad vino a cortar de raíz, como se diría, todo proyecto musical mío; el lanzamiento de mi Cd de músicas Caribeñas, y los shows que cayeron todos hasta el próximo año 2021. Remando con los pequeños ahorros veremos hasta cuando... Lo peor es que no hay una política del Gobierno con respecto al Arte y la Cultura. Hay colegas músicos que están pasando muy mal. Nos organizamos con un grupo de WhatsApp, entre amigos, y semanalmente estamos ayudándoles con algo de dinero”.
Mirta Noemí Talavera (cantante). “Afecta emocionalmente, porque el artista necesita de su público para interactuar, aunque sea en una peña entre amigos. También en lo económico, que es lo que nos sostiene. En nuestro país no se toma todavía al artista como un producto, y prácticamente no tenemos apoyo en el presupuesto del Estado, Y son contados los programas en los medios de comunicación que se ocupan de nosotros, excepto para llenar los espacios o para alguna actividad solidaria siempre recurren a los artistas”.
Diego Sánchez Haase (director de la Orquesta Sinfónica del Congreso Nacional). “El trabajo de orquesta es una labor en equipo que implica de por sí una reunión de muchas personas que están bastante cerca unas de otras. La cuarentena empezó dos días antes del inicio de nuestra Temporada Oficial Internacional de la OSIC, y por lo tanto hemos tenido que postergar todos los conciertos y cancelar todos los ensayos. Además, tenía grandes proyectos internacionales que fueron postergados. El 18 de mayo cumplo 50 años. Mucha música iba a haber alrededor de esa celebración. El 13 de mayo se tocaba en Londres una obra mía; tenía una invitación para dirigir la Sinfónica Nacional de Argentina en el CCK el 15, el 23 tenía que estrenar mi nueva ópera en Italia, y en los primeros días de junio salía de gira con el Bach Collegium de Asunción por Alemania y Bélgica. Todo eso se postergó para temporadas venideras”.
Panchi Duarte (requintista del Trío San Valentín, de Villarrica). “Estamos llevando este momento bien, gracias a Dios. Pero con la tristeza de que todos los eventos de éste año están suspendidos. Así también, las academias públicas de arte en las que ejercía la docencia han cerrado. Y, por consiguiente, la desvinculación laboral que hace que el panorama sea muy incierto”.
Hilda María Basaldúa (vocalista del grupo Cantares Los Basaldúa). “El Gremio de músicos es uno de los mas golpeados por esta pandemia. La base del trabajo nuestro es llevar alegría, sonrisas a personas agrupadas en los acontecimientos sociales o festivales. Esto hace que la generalidad de los músicos estén acusando grandes necesidades. Se agrava aún más ya que el retorno de los músicos a la actividad laboral está marcado para la última etapa de la Cuarentena Inteligente. Deberíamos volver cuanto antes, por ejemplo con serentas de hasta tres integrantes, aplicando los protocolos impuestos por el Ministerio de Salud Pública”.
Ernesto Richer (voz y guitarra del grupo Los Richer Palma). “Nos afectó principalmente en los shows en vivo, con contratos ya finiquitados. Tuvimos que devolver señas de trato y suspender las distintas promociones de canciones nuevas en radios y Tv., donde debíamos presentarnos. En contrapartida, la ventaja es que pudimos trabajar en repertorios nuevos, concluir prácticamente un álbum completo que lo habíamos empezado como tres años atrás, pero que por los diferentes compromisos artísticos no lo pudimos completar antes”.
Mabel López (cantante). “Y a mí realmente me afectó con todo porque con mi familia solo nos dedicamos a las actuaciones en eventos públicos y privados. Jamás pensé que esto nos podría pasar, porque siempre nos preguntábamos que seria de nosotros sin este trabajo, que aparte de gustarnos es nuestro medio de vida. Durante esta cuarentena me dedico a hacer serenatas virtuales a mis clientes que están de cumpleaños con dedicatorias y música y así me gano algo. Ya gastamos todo lo que pudimos ahorrar y estamos en manos de Dios, hasta que podamos retomar nuestro trabajo con mis hijos!”.
Alejo Benítez (director del grupo Generación, de Villarrica). “Estamos afrontando esta complicada situación laboral con el respaldo de la familia. Nos duele estar físicamente alejados de nuestro público, pero confiamos que en la brevedad estaremos compartiendo música y alegría con la valerosa gente de bien de nuestro país. Seguimos firmes en el compromiso de proyectar lo mejor del Grupo Generación”.
Lizza Bogado (cantante). El sector artístico cultural y afines es uno de los más afectados. Fue el primero en entrar en crisis y hasta hoy no ha sido tenido en cuenta en las estrategias de reingreso al ámbito laboral. Hoy estamos llegando a través de las redes y plataformas. Y con alegría veo que hay ingenio para tener auspiciantes que sostengan el trabajo, desde conciertos hasta serenatas por Internet. Sabemos que nuestro rubro tendrá nuevas condiciones y cambiará con esta pandemia”.
Roscer Díaz (requintista). “Sin duda, la aparición de la coronavirus ha significado una nueva forma de encarar todas nuestra actividades culturales. De alguna manera, creo yo, este cambio se iba a dar con los avances tecnológicos. Solo que se adelantó y nos tomó de sorpresa. En este caso, los conciertos virtuales fueron y son una opción mas que interesantes. En mi caso, tuvimos con mi grupo el honor de poder ser los primeros en ofrecer un Concierto Online en el Paraguay, que lo hicimos en casa de manera casera pero altamente profesional”.
Lilian Romero (cantante). “Estoy con la esperanza de un mejor mañana para todos, con público y con aplausos para los artistas! Es mi deseo y que el pan de cada día se haga presente en todos los hogares de este bendito Paraguay”.
Fernando Garbarino (guitarrista). “La pandemia me afecta de forma directa como docente y artista. Extraño mucho poder estar en aulas con mis alumnos del Conservatorio Nacional de Música. Los docentes tuvimos que reinventarnos para actualizar los contenidos y saber llegar a nuestros alumnos con las clases a distancia. También lidiar con problemas como el que no todos los estudiantes poseen buena conexión a Internet ni los recursos necesarios. Cómo artista me afecta, pues el 100% de lo que antes podía producir, ya sea en eventos como conciertos, showscases o grabaciones, se paralizaron”.
Noemí Oviedo (cantante). “Lastimosamente somos el sector más golpeado por esta pandemia, sin poder tener actuaciones. Nos encontramos sin apoyo y bastante olvidados, preocupados por nuestras familias. Pero nos mantenemos con la fe y esperanza de que todo termine pronto y vuelvan los festivales, acontecimientos sociales. Extraño muchísimo los escenarios”.
José Carlos Cabrera (guitarrista clásico). “Actualmente combino mis actividades artísticas con la docencia. En el ámbito docente no hemos parado en ningún momento por la pandemia. Seguimos dando clases con normalidad por medio de plataformas digitales, lo cual fue complicado en principio, pero ya nos hemos adaptado por completo. En lo artístico tenía planeado realizar un Ciclo de Música de Cámara con músicos de la OSIC durante el año y recitales para la promoción de mi disco ‘Oración’, con obras de Mangoré, que lo lancé en diciembre pasado y probablemente no pueda volver a presentarlo este año en público”.
Lidia González (cantante). “En estos tiempos de Pandemia, nuestra situación como trabajadores del arte se ha visto tremendamente golpeada, pero siempre pienso que los tiempos adversos deben servir para aprender. Que la planificación efectiva y un trabajo en conjunto como gremio es fundamental para sobrellevar lo que venga. Aprender a compartir y a ser más solidarios con nuestros pares. El rol del artista es fundamental en la sociedad, y sólo va a ser reconocida y respetada el día en que nosotros mismos empecemos por casa”.
Óscar Lezcano (integrante del Trío Nendive). “En realidad afecta mucho en lo laboral esta pandemia. Más a nosotros que dependemos de los espectáculos para poder generar ese ingreso económico. Muchas personas piensan que los músicos ganamos mucho dinero y que tenemos la posibilidad de ahorrar y no es tanto así. Dependemos exclusivamente de los contratos, inclusive ya teníamos shows asegurados hasta mayo y a partir de marzo fueron cayendo todo. Es un momento muy difícil para todos. Y con la Ayuda de Dios vamos a salir de esta y el próximo año arrancar de nuevo. Ahora nos toca esperar, y ayudar quedándonos en la casa”.
Juan Gerardo Ayala (flauta traversa). “En un momento donde el futuro parece tan incierto. Lo que está aconteciendo afecta de diferentes maneras las actividades de todas las personas. Nosotros, los artistas en particular, estamos lidiando con un ambiente al que muchos estamos acostumbrados y muchos no, que es la soledad. Muchas veces nuestros mejores momentos creativos se dieron en soledad y quietud. Estábamos acostumbrados a vivir en un mundo tan acelerado y cambiante que no era tan bueno para la salud, y ahora podemos tomarnos este tiempo para reflexionar y conectarnos con lo que tenemos en nuestro interior y aprovecharlo para mantener la motivación de seguir creciendo como seres humanos y artistas”.
Guido Cheaib (guitarrista del grupo Paraguay Tres). “Este tiempo trajo soledad, ingratitud. La belleza de la música a través de sus intérpretes, se calló. Nadie se atreve a levantarla, todos la ignoran, pero, reverdecerá. Y será el espíritu del caminante, la alegría de los niños y el renacer de la naturaleza”.