Los números de la infamia

El Estado es la forma de organización política dotada de poder soberano e independiente, que integra la población de un territorio. Posee una organización social, política, jurídica coercitiva y económica, conformada por un conjunto de instituciones que tienen el poder de regular la vida de una sociedad. 

Cargando...

Por otro lado, el Tratado de Itaipú fue firmado en 1973 entre dos Estados soberanos, Paraguay y Brasil, con el fin supremo de aprovechar los recursos hidroenergéticos del río Paraná, desde los desaparecidos Saltos del Guairá hasta la desembocadura del río Yguazú. La usina hidroeléctrica, construida en condominio entre Paraguay y Brasil cuenta con 20 máquinas de 700 MW cada una, sumando una potencia instalada de 14.000 MW. De esta potencia, 7.000 MW corresponden al Paraguay, porque así lo determina el Tratado; es una decisión lógica que deviene de la propiedad en condominio de un río internacional limítrofe, el Paraná. Es decir, la mitad de las aguas son nuestras. Diez máquinas generan en 50 Hertz, frecuencia paraguaya, y las otras 10 en 60 Hertz. 

A partir de estas dos definiciones, jurídicas y técnicas, hagamos algunas operaciones sencillas usando la matemática más simple, la de sumas y restas; tal vez algunas divisiones y multiplicaciones. Demostraremos así que los números dejan al desnudo la claudicante diplomacia paraguaya y la pusilánime posición técnica de las diversas administraciones que se turnaron en la binacional. Convengamos también en que los Estados no defienden sentimientos, sino intereses (Lord Palmerston). 

En el 2016, la generación de energía de Itaipú llegó al récord de 103.098.000 de MWh, mientras que la garantizada se mantiene aproximadamente en 75.000.000 de MWh. Debemos recordar que esta cifra menor es la que técnicamente la Itaipú se compromete a entregar a los compradores. No obstante, la energía superior a la garantizada saltó a 28.000.000 de MWh, es decir, 27 % a más. Esta cifra es conocida como el récord histórico, tan pregonado en el ámbito local e internacional. 

Asimismo, desde el 2002, la alta administración de Itaipú decidió establecer una forma de comercialización un tanto rara: la tarifa oficial, devenida de la contratación de la potencia instalada, a US$ 22,60/kWmes. La otra tarifa, la de energía, resulta del precio de equilibrio entre los gastos y la venta; es decir, el monto que multiplicado por la cantidad de energía producida en un año me equilibre el balance, ¡sin lucro! Se adquiere a través de la ANDE y la Eletrobrás (Furnas) y resulta en US$ 44/MWh. Hace años que esta cifra se mantiene inalterable, a pesar de las variaciones de la energía producida y los gastos de operación. 

La otra tarifa de energía, inventada por la alta gerencia paraguaya en connivencia con nuestros socios, es de aproximadamente US$ 5/MW (excedente “no garantizada”). Al combinarse ambas tarifas de energía se reduce considerablemente la tarifa final usada por las mencionadas compradoras. En otras palabras, del costo total de US$ 3.291.000.000 por año, lo que incide realmente son los 75.000.000 MWh de energía garantizada ¿Qué pasó con el 27 % restante en el 2016? Esta magnitud es utilizada por ambos países para otros gastos que más bien son de tinte geopolítico. El reparto de este 27 % adicional, tanto en el 2016 como en todos los años con excedente, fue siempre a favor del mayor comprador, es decir la Eletrobrás. De las migajas retiradas por Paraguay se sigue oxigenando la moribunda ANDE. No podemos olvidar que el 30% de pérdidas anuales, en cualquier empresa del mundo, lo dejaría fuera del mercado. 

Beneficios para el Paraguay 

El general Pozzo declaró en esta misma columna, en varias ocasiones, que los administradores de Itaipú, el presidente del BCP, varios ministros y otros altos políticos hablan de un ingreso adicional de aproximadamente US$ 1.000 millones, por margen. Esto ocurriría al dejar de pagar unos US$ 2.000 millones/año, a partir del 2023 (cancelación de la deuda). Ante esta expresión de deseo, que es más política que económica, solo podría recaudarse de las siguientes formas: 

1) Congelando la tarifa en US$ 44/MWh, en perjuicio de los consumidores finales de ambos países. 

2) Aumentando el monto de los royalties, resarcimientos, cesión, etc. 

3) Manteniendo la nueva tarifa reducida, en beneficio de los consumidores finales, pero Paraguay pasaría a vender sus excedentes a precio de mercado. La tarifa de energía sin el pago de la deuda se calcula alrededor de 17 US$/MWh, o menos, a partir del 2023. 

Debemos recordar, no obstante, que el tratado impide a la Itaipú tener lucros; es por ello que la única forma de aumentar los ingresos en la margen derecha, con el actual acuerdo, es modificándolo. Entre estas variaciones debe incluirse el precio justo, que no es otra cosa que el precio de mercado. Esto abona nuestra antigua tesis de que dicho instrumento jurídico no es vitalicio. Nunca habrá un mejor momento que el 2023, pero nada impide que lo iniciemos antes. 

En la infografía anexa, un sistema unifilar de medidores en colores, podemos apreciar varias cantidades de potencia producida en Itaipú; son guarismos provenientes de un sistema público “on line”, dispuesta por la entidad. El día jueves 6 de julio, a las 08:26, la “radiografía” de la generación era eso. Como verá el amable lector en ella se presenta la producción de las máquinas de 50 y de 60 Hertz, su paso por la Subestación Margen derecha, SEMD, y su re-paso a la subestación de Furnas-Eletrobrás (Brasil) y ANDE (Paraguay). 

En la imagen aparece solo un total de 10.205 MW, del cual las máquinas brasileñas aportaron 5.080 MW y las paraguayas 5.125 MW. Eletrobrás lleva 8.931 MW, mientras que el Paraguay solamente 1.248 MW, el 12,22%. Debemos recordar que en el histórico producido desde 1983 ¡34 años! Paraguay solo ha retirado el 7%. 

Del total paraguayo producido en 50 Hertz, 3.875 MW fueron seccionados (recién a partir del 2011) en la SEMD y enviados al consumidor brasileño. Durante 29 años la energía de 50 Hertz no utilizada por Paraguay iba directamente al Brasil, ¡sin pasar por la subestación paraguaya! 

En esta imagen se demuestra además que la energía en 60 Hertz va directamente a la Subestación de Furnas y posteriormente al consumidor brasileño. La ANDE recibe 763 MW en 220 mil voltios y 485 MW por la línea de 500.000 voltios, es decir por la famosa conexión Itaipu-Villa Hayes ¡Recién a partir del 2013! 

Itaipú Vs. Acaray 

Si dividimos 7.000 MW, la potencia instalada paraguaya en Itaipú (50 Hertz), por 200 MW, la potencia de Acaray, tenemos 35 centrales similares. Son casi tres docenas de productoras limpias y seguras de energía renovable; ¡el sueño de todo estadista! ¿Por qué, sin embargo, aparecen cantidades menores en los medidores expuestos? Veamos: 

Si la demanda de la ANDE en horas del llano (de madrugada y mañana) es de 1.800 MW y en horas pico 2.000 MW, tenemos un excedente teórico aproximado de 5.000 MW que podríamos vender al Brasil. 

¿Por qué no aparecen en el esquema unifilar anexo cifras cercanas a los 7.000 MW en cada margen? La menor producción en una hidroeléctrica solo obedece a dos causas concretas: máquinas paradas por mantenimiento o poca afluencia de agua. El consumo propio, es decir, la energía utilizada en los servicios auxiliares es poco significativa. 

“Creemos que la historia de la deuda de Itaipú y las condiciones de reembolso deben ser reexaminadas por el nuevo Gobierno, en cooperación con Brasil, y tal vez con la asistencia del Fondo Monetario Internacional (FMI) o las Naciones Unidas”, decía Jeffrey Sachs en el 2012, durante una presentación preliminar de su informe: “Apalancando la Hidroenergía de Paraguay para el Desarrollo Económico Sustentable”. Creemos que esta revisión debe incluir las instalaciones físicas, especialmente de los medidores y la SEMD en general que, recordemos, continúa en territorio binacional. Hemos dicho docenas de veces que la subestación paraguaya debe salir del territorio “binacional” donde el director técnico ejecutivo es brasileño. 

Amables lectores: ¿Justifica construir, a alto costo, una pequeña central hidroeléctrica más, mientras tengamos estos excedentes millonarios? ¡Claro que no! Toda la energía que produzcamos fuera de Itaipú será llevada por el Brasil … de Itaipú. 

Números

Los números desnudan a la claudicante diplomacia paraguaya y a la pusilánime posición técnica de las adminis- traciones que se turnaron en la entidad.

En otros

¿Qué pasó con el 27% restante en el 2016? Esta magnitud es utilizada por ambos países para gastos que más bien son de tinte geopolítico.

Reparto

El reparto del 27% adicional, en 2016 y en todos los años con excedentes, fue siempre a favor del mayor comprador, es decir, la Eletrobrás.

29 años

Durante 29 años, la energía de 50 Hertz que no es utilizada nuestro país iba directamente al Brasil, ¡sin pasar por la subestación paraguaya!

* Exsuperintendente de Energías Renovables de IB

Enlance copiado
Content ...
Cargando...Cargando ...