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El Art. I del tratado prescribe: ‘Las Altas Partes Contratantes convienen en realizar, en común y de acuerdo a lo previsto en el presente Tratado y sus Anexos, el aprovechamiento hidroeléctrico
de los recursos hidráulicos del río Paraná, pertenecientes en condominio a los dos países, desde e inclusive el Salto del Guairá o Salto Grande de Sete Quedas hasta la boca del río Yguazú.
A partir de este concepto el aprovechamiento comprende la creatividad y astucia de cada parte para la obtención del consecuente dividendo por el uso del yacimiento energético más importante en la historia de nuestro país.
Para llevar adelante este cometido el mismo instrumento jurídico que rige el funcionamiento de este emprendimiento se apoya en las disposiciones de las Bases Financieras y de Prestación de los Servicios de Electricidad.
Art. IV, numeral IV.1; ‘El ingreso anual, derivado de los contratos de prestación de los servicios de electricidad deberá ser igual, cada año, al costo del servicio establecido en este Anexo’. Traducido es, ingreso igual al egreso, de otra manera entendemos que el emprendimiento no tiene fin de lucro.
Queda claro que la empresa se diseñó para la generación de beneficios a los países a través de la transformación del potencial de la central en aplicaciones de confort o como materia prima para la explotación industrial de cada país y complementados con las regalías, sean éstos, royalties, resarcimientos, compensaciones u otros conceptos afines.
La mezquina utilización de estas concesiones de parte de los nuestros es una falta inmoral de la que debemos hacernos cargo. En los años 70, 80″ y 90 recuerdo que los recursos royalties principalmente eran mayoritariamente desembolsados a través de intendencias y gobernaciones de cada margen de la zona de influencia del complejo, regiones del área de la central del lado brasileño sufrieron transformaciones estructurales positivas de grandes proporciones. Para comprobar solo debe observarse el gran desarrollo económico de esas zonas. Lamentablemente los nuestros, indiscriminadamente los utilizaron para objetivos particulares, dando como resultado un retraso del desarrollo de la región. En la actualidad, estos recursos son derivados a las arcas de la administración central, la práctica es la misma, se utilizan para pagos de gastos rígidos y de personal, las inversiones quedan relegadas a meras intenciones.
Ante nuestra dura realidad en el ambiente de medios de comunicación se manejan informaciones poco alentadoras, incluso desde las carpas de los radicales críticos incentivan una visión centrada en mayores recursos financieros para los nuestros, generará más codicia y tentación para la continuidad, dinero fácil y nula inversión, sin infraestructuras ni crecimiento. A mi manera de ver, a más dinero más gastos, en cambio a más inversiones más desarrollo. Sostengo, salvo mejor parecer, que el apalancamiento con garantía de la Itaipú sería mi propuesta para ambos socios, para concretar esa idea se requieren de hombres excepcionales y comprometidos con la causa, con visión empresarial.
Una contraposición interesante se da con las comercializadoras principales de la Itaipú, ANDE y Eletrobras, realidades de polos opuestos, el criterio de renta es una historia diferente en estos casos. La ANDE se sumerge entre la ineficiencia, falta de recursos suficientes para la actualización y modernización de su sistema de generación, transmisión y distribución. En la otra margen, la historia es diametralmente opuesta, la Eletrobras es comercializadora, agente financiero, acreedora de Itaipú, cotiza en la bolsa de valores internacionales, recibe dividendos, entre otros.
Recordemos que la Itaipú ha soportado los enormes sobrecostos de bienes y servicios durante la construcción de la obra por efecto de diversos eventos de desequilibrios financieros mundiales, sobrecostos descontrolados de provisiones y de equipos electromecánicos de procedencia extranjera en ciertos pasajes y ni hablemos de las megas inflaciones o devaluaciones de la moneda del Brasil en periodos importantes de la historia financiera de la entidad, comisiones, multas, gastos administrativos, entre otros sobrecargaron la gigante deuda del emprendimiento. Toda la matemática financiera desempeñó una fórmula clave para generar un extraordinario negocio financiero a favor de nuestro socio. Hemos observado, desde las gradas, el desempeño estratégico de nuestra contraparte, ellos hicieron sus deberes y nosotros seguimos reclamando, requiriendo y pidiendo permiso, participemos como grandes para lo cual nuestro actuar debe estar a la altura de las exigencias, con retóricas, arengas y resentimientos nuestro destino está marcado, lo mismo de siempre, la definición del perdedor, esperar un resultado diferente obrando una y otra vez de la misma manera.
El 24 de noviembre de 2021, el presidente Mario Abdo Benítez se reunió con el mandatario brasileño Jair Bolsonaro en el Palacio presidencial de Planalto, según se supo, trataron la base política de la revisión del Anexo C de Itaipú, paso necesario y obligatorio para arribar a un buen acuerdo. Creo en una propuesta seductora al socio para conseguir la motivación y voluntad para una concreción favorable de partes, insisto, visión hacia una meta más que en la renta.
Fue el día, precisamente el expresidente de nuestro país Ing. Juan Carlos Wasmosy, en sesión de Cámara de Senadores, expresó su desacuerdo con lo manifestado por el Contralor General de la República, que el pasado 19 de julio de 2021, Camilo Benítez, en conferencia de prensa, anunció aspectos del informe final de conclusión de la auditoria sobre el saldo de deuda de la Itaipú Binacional, adelantó que el Tratado de Itaipú se violó entre 1984 y 1996, con excepción del año 1991. Se suma al debate sobre un sensible tema, la deuda de Itaipú, un actor clave que reclama derecho a la defensa y la manifestación de otras partes debidamente competentes para el efecto, es el momento de realidades, los juzgamientos deben ser en base a justicia, la emoción debe esperar.
La entidad dispone de una Dirección General que se apoya en profesionales de las áreas técnica, jurídica y financiera de manera directa para estos asuntos, se suman las direcciones, administrativa y de coordinación, a más de la experiencia en relacionamiento binacional, se podría optimizar a aquellos en una instancia vital de las negociaciones, las improvisaciones nunca fueron aliadas del éxito, o forjamos nuestro destino o somos hijos de la casualidad.
Objetivos
La empresa se diseñó para beneficiar a los países con la transfor- mación del potencial de la central en confort o como materia prima para las industrias...
Negocio
Toda la matemática financiera desempeñó una fórmula clave para generar un extraordinario negocio financiero a favor de nuestro socio.
(*) Exsuperintendente de la Universidad Corporativa Itaipú – UC.GP