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Adolescencia (13-19 años): consejos de belleza
Durante la adolescencia, el acné es una de las preocupaciones más comunes debido a los cambios hormonales.
Entre los consejos se destaca la limpieza diaria, con un limpiador suave dos veces al día.
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También será necesaria una hidratación ligera; para esto optá por productos Oil-free, para evitar obstruir los poros. No olvides la protección solar todos los días y evitá tocar el acné, para prevenir cicatrices.
Veinteañeros (20-29 años): cómo cuidar la piel
En esta etapa, la piel puede empezar a mostrar signos tempranos de daño solar acumulado y deshidratación.
Es fundamental la exfoliación regular, ya que esta ayuda a eliminar las células muertas y promueve la renovación celular.
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Para el cuidado de los labios y ojos usá bálsamos y cremas específicas para estas áreas para prevenir daños.
También será necesario cumplir una rutina antioxidante con sueros con vitamina C para contrarrestar el daño solar, y mantener un estilo de vida saludable, en el que se priorizan el sueño y una dieta rica en nutrientes.
Cuidados básicos para treintañeros (30-39 años)
En este momento es cuando aparecen líneas finas, y la piel puede empezar a perder elasticidad y firmeza. La consistencia en el cuidado es primordial.
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Implementá una rutina estricta de limpieza, hidratación y protección solar y recurrí a productos antiedad, para integrar retinoides y péptidos que promuevan la producción de colágeno.
Un masaje facial que ayude a tonificar y mejorar la circulación no estará de más, así como una correcta hidratación interna y externa: usá sueros con ácido hialurónico y asegurate de beber suficiente agua.
Los cuarentas (40-49 años): cuidados esenciales
La pérdida de volumen y firmeza, junto con la aparición de manchas oscuras, son preocupaciones habituales en esta etapa de la vida.
¿Qué hacer? Usá cremas ricas y emolientes que ayudan a nutrir la piel seca y madura. Optá por tratamientos con ácido, como el ácido glicólico, para mejorar la textura de la piel y siempre usá protección solar intensa, ya que la piel es más susceptible a los daños.
Considerá tratamientos profesionales como peels o microdermoabrasión.
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Cincuenta y más (50 + años)
La menopausia puede afectar dramáticamente la piel; la sequedad y la sensibilidad son problemas frecuentes.
Ideal es optar por cuidados enriquecidos con productos que proporcionen hidratación profunda y/o contengan aceites naturales.
La terapia hormonal también puede ser una buena idea, así como la nutrición intensiva mediante la ingesta de alimentos ricos en omega-3 y antioxidantes. Siempre monitoreá cambios en la piel, incluidas las manchas.