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En la sesión extraordinaria de este martes último, el Senado aceptó las modificaciones introducidas por Diputados, lo que permitió la sanción del proyecto de ley de control del espacio aéreo paraguayo. Por ese motivo, la propuesta legislativa pasó ahora al Poder Ejecutivo.
La Cámara de Diputados eliminó la posibilidad de derribar aviones argumentando que el país no tiene condiciones para abatir aeronaves en vuelo. Pero fuentes militares, a través de las redes sociales, informaron que desde 2011 la Fuerza Aérea cuenta con dos radares tridimensionales móviles de la empresa Elta Systems Ltd, firma subsidiaria de la Israel Aeroespace Industries Ltd, compañía del Estado israelí.
Según el contrato, el monto total de la operación fue de G. 14.011.025.000 (US$ 3.467.000), es decir, US$ 1.740.500, cada uno.
El primer radar fue presentado al entonces presidente de la República, Fernando Lugo, el 7 de diciembre de 2011, y el segundo a fines de marzo de 2012.
La fuente militar indicó que los dos radares tienen un alcance de hasta 100 kilómetros a la redonda y, como son móviles, podrán recorrer todo el país. Agregó que un radar está ubicado en Luque y otro puede ser desplazado para su uso en cualquier punto de nuestro país.
Características
Las características técnicas de los radares móviles EL/M-2106 NG: “Radar primario tridimensional” con un alcance del 100 km “para todo tipo de plataformas volantes, inclusive aviones de combate de alta velocidad y vuelo bajo, helicópteros en vuelo estacionario, aviones ultralivianos y no tripulados (UAV)”.
También debe suministrar “automáticamente rastreo, identificación y clasificación de hasta 60 blancos simultáneamente”.
En redes sociales
En la comunidad “Aviación Paraguay” del Facebook se expresaron críticas a los parlamentarios que truncaron la posibilidad del derribo de vuelos ilegales y la insistencia en la falta de equipos de rastreo. Las críticas apuntaban a la senadora Desirée Masi (PDP).
Uno de los usuarios enumeró las especificaciones técnicas de los radares. “Son de cuarta generación, 3D, con capacidad para rastrear y seguir hasta 60 blancos a la vez, capacidad todo-tiempo, interconectable con sistemas antiaéreos (incluyendo artillería y misiles), desplegable en apenas 15 minutos, capacidad de detección de aeronaves civiles a 80 kilómetros, aviones de combate entre 40 y 60 kilómetros; además de helicópteros volando en estacionario a 25 kilómetros”, comentó.
Añadió que el equipo permite un rango de precisión de 30 metros, con el acompañamiento de las aeronaves Tucano artillables con pods de ametralladoras y coheteras. “Son factibles para la destrucción de narcoaviones”, acota. Además, en mayo de 2013 se realizó Parbra III, ejercicio conjunto de las fuerzas aéreas paraguaya y brasileña de interceptación de vuelos ilegales, con personal paraguayo entrenado.
Legislativo dio la espalda
Por amplia mayoría, el Senado sancionó este martes 3 de febrero el proyecto de ley de vigilancia y protección del espacio aéreo paraguayo, sin contemplar el derribo de aviones. Los legisladores consideraron que el país no tiene condiciones para abatir vuelos ilegales. La senadora Desirée Masi (PDP) criticó a la Dinac porque no adquiere equipos para detectar vuelos irregulares, pese a que en 2014 se le otorgó un presupuesto de G. 8.000 millones (US$ 1.700.000) y en los últimos cinco años G. 12.000 millones. La legisladora agregó que al derribar un avión se puede malograr la vida del empleado de un narco porque los patrones “viajan en primera clase y no en avionetas”.