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Para la central obrera, en nuestro país, falta una política económica que priorice la inversión en el interior para que la gente tenga trabajo y se arraigue en su región.
Comentó que una de las causas de la informalidad y de la desocupación es la falta de oportunidad para trabajar en el campo. “Necesitamos caminos, rutas asfaltadas, asistencia a los pequeños productores e instalación de industrias”, solo así la gente no migrará a las ciudades. A su criterio, hay más de 1.000.000 de desocupados, la mayoría son jóvenes, quienes vinieron del campo con sus padres para buscar mejores horizontes en la capital. “Al no tener trabajo, se dedican a la informalidad como los vendedores ambulantes, otros son changueros y a ese sector hay que ayudar”, apuntó. Zayas apoya las iniciativas privadas porque cree que es la forma más segura de crear fuentes de trabajo, pero al mismo tiempo indicó que el Gobierno debe controlarlo para que cumplan con las leyes laborales, solo así habrá trabajo seguro.
Zayas comentó que la CNT está actualmente en una mesa diálogo con el Gobierno y está trabajando en el campo. Mencionó que la semana pasada se habilitó un sistema de riego en San Pedro y beneficia a pequeños productores del campo. Explicó que fue una de las propuestas de la central para dignificar a los campesinos y evitar la migración a la ciudad.
En la mesa de diálogo con el Gobierno también surgió la idea de construir casas a los campesinos. En ese sentido, hoy se habilitarán 77 viviendas en la colonia 3 de Mayo de Caaguazú. Agregó que en esta obra trabajaron los propios beneficiarios y son nuevas visiones que ayudan a los campesinos, además de tener trabajo, contar con una casa. Adelantó que seguirá esa asistencia para que los labriegos produzcan y se afinquen en su territorio.
Zayas apuntó que aún hay muchos desafíos que los sindicalistas deben acompañar para que se generen nuevos puestos de trabajo. Finalmente, reconoció que el desafío es duro porque con el sector privado se debe luchar por el cumplimiento de las leyes laborales, mientras que el Gobierno debe entender y escuchar los reclamos de los trabajadores.