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La propuesta que fue entregada el lunes en mesa de entrada de la Cámara de Senadores califica como infractor al revendedor de entradas para cualquier tipo de evento público.
También se establece que los infractores que fueran descubiertos infraganti tendrán como sanción el pago obligatorio de una multa equivalente a 3 jornales mínimos, es decir, unos 210.000 guaraníes.
Además serán confiscados todos los boletos o tickets hallados en su poder y en caso de reincidencia, tendrán una pena privativa de libertad, por un periodo de entre tres meses y tres años.
Con anterioridad, el parlamentario Óscar Tuma presentó un proyecto de ley que no pasó de ese calificativo.