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Poner en pausa las negociaciones del Anexo C del Tratado de Itaipú, debido al espionaje que realizó el gobierno de Jair Bolsonaro desde junio de 2022 y que -según confirmó Brasil- continuó hasta marzo de 2023 durante la administración de Luiz Inácio Lula da Silva, generó numerosas críticas.
Ante los cuestionamientos por el posible perjuicio que esto representaría para el país, el presidente Peña sostuvo que “debemos defender la soberanía del Paraguay al costo que sea”.
En entrevista con Radio Monumental, aseguró que “este cargo no es para cobardes”, cuando se le preguntó si midió los riesgos y si asume las posibles consecuencias de esa decisión.
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La pausa en las negociaciones con el Brasil fue una de las cuatro medidas adoptadas por el gobierno paraguayo luego de que la Cancillería del vecino país confirmara que agentes de inteligencia de ese país espiaron a durante las negociaciones sobre la tarifa de Itaipú entre junio de 2022 y marzo de 2023. Las otras acciones incluyeron el llamado a consulta del embajador paraguayo en Brasil, el pedido formal de explicaciones al gobierno brasileño y la apertura de una investigación local.
Varios expertos en energía advirtieron que congelar las negociaciones del Anexo C —que regula aspectos clave de la operación de Itaipú— puede traer consecuencias negativas para Paraguay; sin embargo, Peña sostuvo que sin una posición firme el país estaría renunciando a su capacidad de negociación.
“Probablemente, si nosotros no hacíamos eso, jamás hubiésemos aumentado el precio de la energía de Itaipú en beneficio de Paraguay en el mes de mayo de 2024”, agregó. Para ilustrar su punto, recordó la tensa reunión que tuvieron en enero de ese año con autoridades brasileñas: “Fue una reunión muy dura, donde Brasil escuchó muchas verdades que probablemente nunca antes un presidente paraguayo les había dicho. Salimos de esa reunión casi dando un portazo”.
Peña insistió en que, aunque se trate de una jugada riesgosa, el país necesita líderes que no se amedrenten ante las presiones. “Hay mucha gente que se atemoriza. Nosotros hemos tenido cientos de casos a lo largo de nuestra historia de paraguayos que se han atemorizado ante brasileros, ante argentinos, ante cualquier otra nacionalidad. Yo creo que los paraguayos tenemos que confiar un poco más en nosotros”, razonó.
El presidente agregó que la negociación con Brasil no debe darse a cualquier precio. “El camino del desarrollo, del progreso, no es fácil. Nadie regala nada. Requiere tomar decisiones osadas, con coraje”, afirmó.
Consultado si la operación de espionaje continuó luego de la salida de Bolsonaro, Peña respondió que, según información confirmada por Brasil, las actividades se extendieron hasta marzo de 2023, ya bajo el mandato de Lula. Sin embargo, aclaró que no conversó directamente con su par brasileño sobre el tema, porque las gestiones se manejan en el nivel de cancillerías.
Falta de transparencia en Itaipú
En otro momento de la entrevista, el presidente se refirió también a las críticas por falta de transparencia en el uso de los fondos provenientes de Itaipú. “Se puede hacer más, sí, pero yo estoy en condiciones de decir que todo se va a mostrar”, afirmó.
Contrariamente a lo que sucede, Peña aseguró que los mecanismos de compra de la binacional son públicos, están reglamentados por el tratado y son los mismos que se han aplicado durante los últimos 20 años tanto en Brasil como en Paraguay. “No es un sistema nuevo que inventamos nosotros”, enfatizó.
Finalmente, defendió la forma en que utilizan los recursos de Itaipú, apuntando que desde el anuncio del acuerdo de tarifa, su gobierno explicó en qué invertiría el dinero. Dijo que están avanzando en la construcción de 100 centros de atención a la primera infancia, ocho hospitales y mejoras en salud, transporte y educación. “Las demandas de transparencia son válidas, y vamos a responder absolutamente todo”, concluyó.