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El Ing. Pedro Ferreira explicó que la tarifa no es otra cosa que el presupuesto dividido por la producción de la central y advirtió que si las partes llegan sobre el punto a un arreglo razonable “de acuerdo con los intereses nacionales, vamos a tener una tarifa de Itaipú interesante en 2024″.
Enfatizó el técnico compatriota, quien condujo la ANDE en 2019, año de la frutada “Acta bilateral” o Acta secreta”, que la definición del costo unitario del servicio de electricidad de la entidad binacional en 2024 debe definirse antes de que se inicie ese ejercicio.
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“Eso sería lo normal y no como en los años anteriores (2022 y 2023)”. En es ejercicios, recordó Ferreira que debió esperarse que transcurriera más de medio año para aprobarlas, cuando ya estaban vendiendo la energía.
La tarifa 2024 de Itaipú no es una tarifa cualquiera, apuntó Ferreira, “en realidad la la primera que va a establecer el Consejo de Administración de Itaipú, ya con duda cero”.
Marcará el rumbo de la negociación del Anexo C
La desaparición del peso de la deuda de Itaipú en su costo es, por su gravitación en los ejercicios precedentes, de extraordinaria relevancia. “marcará el rumbo de toda negociación respecto al Anexo C del tratado de Itaipú, cuyas disposiciones, según el Tratado, caducaron el 13 de agosto último, fecha en que el documento internacional cumplió 50 años de vigencia.
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“Entonces no es cualquier tarifa”, insistió y, en su evaluación del centenar de días de gobierno que acaba de cumplir el colorado-cartista Santiago Peña, agregó cuanto sigue: “me da la impresión que dentro de estos 100 primeros días no hubo ninguna bajada de línea, clara, de parte del gobierno respecto a cuál va a ser la política que el Paraguay propugna” en las futuras negociaciones.
Ferreira completó su “impresión” sobre el punto al señalar que el gobierno enfrenta un par de opciones: que diga “vamos bajar la tarifa al piso. Vamos a ocho dólares (US$ 8 por kWmes), pero el Paraguay compra su mitad (la mitad de la producción de Itaipú)”.
Para Ferreira esta opción es muy positiva, porque el Paraguay se hace cargo, porque ejerce toda su soberanía en la gran central binacional. Agregó que la ANDE podrá, en esa tarifa, comprar esa mitad, “que antes salía US$ 22,6/KWmes (entre el 2009 y el 2021), pero apenas el 30%, o el 15% de la producción total de Itaipú).
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¿Buscar una tarifa social más exendida?
En cuanto a la segunda opción, la de mantener la tarifa de la binacional sus niveles más elevados, dijo que el gobierno convertirá el gasto financiero en gastos sociales, llevar los ingresos adicionales al Presupuesto General de Gastos de la Nación, “entonces vamos a tener una tarifa social más extendida”.
“También puede ser importante, siempre que se lo maneje con transparencia”. Una ve más, en su rol de evaluador apuntó que el Ejecutivo ya tuvo 100 días, o más, para decir qué es lo pretende hacer, “pero hasta ahora no hay pistas...”.
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Los cuatro puntos faltantes que el actual gobierno debe encarar , que solo los mencionaremos por falta de espacio son: 2. Presupuesto 2024. 3.- Gastos sociales. 4.- Nivel o cantidad de potencia que contratará la ANDE para el ejercicio 2024. 5. Situación del Convenio Operativo que se firmó en 2007, que caduca en diciembre próximo y que permite al Paraguay el uso prioritario de la potencia excedente Itaipú”. Pregunta el ténico si esos beneficios seguirán vigentes o no o cómo lo van a sustituir.