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La expectativa –subrayó el gobernador Alberto Weretilneck– es que aumente un 15 por ciento el número de visitantes brasileños durante esta temporada en Bariloche, pasando de los 37.000 del año pasado a unos 41.000-44.000.
El incremento de turistas brasileños amantes de la nieve –tan populares en la ciudad que suele ser apodada “Brasiloche”– se basa en dos pilares: una fuerte promoción directa entre diez millones de clientes del Banco de Brasil, gracias a un acuerdo con la entidad, y el incremento del número de vuelos.
De hecho será “el año con mayor conectividad aérea en la historia argentina”. Bariloche tendrá 155 vuelos semanales que la conectarán con Buenos Aires pero también con ciudades del interior argentino (entre ellas Rosario, Bahía Blanca y Tucumán) y 12 vuelos directos con San Pablo en Brasil.
Volarán a la ciudad Aerolíneas Argentinas, Latam, Andes y lanueva “low-cost” Flybondi, en tanto Latam, Gol y Azul serán las encargadas de las conexiones con Brasil. Diego Piquín, presidente del Emprotur (Entre Mixto de Promoción Turística de Bariloche), anticipó que la temporada para esquiadores y peatones en Cerro Catedral abrirá el 30 de junio. El centro ya tiene nieve en la cima y se cuenta, además de las precipitaciones naturales, con fabricación de nieve. Además de Catedral, en Bariloche se puede esquiar en Piedras Blancas, y en la provincia de Río Negro la localidad de El Bolsón –a 120 kilómetros– tiene su centro invernal en el cerro Perito Moreno.
Fotos: Jazmín Centurión, ABC Color.