Profesor de Ciencias Medioambientales en la Florida International University (FIU), donde dirigió el Centro Internacional de Investigación de Huracanes por más de diez años, Leatherman escogió la salvaje playa de Okrakoke, que “fue la casa del pirata Barbanegra”, como la mejor del año.
Le siguen en la recién publicada lista de las 10 mejores playas de EE.UU. en 2022 Caladesi, cerca de Clearwater, en la costa oeste de Florida y más accesible por mar que por tierra, y Coopers Beach, en Southampton (Nueva York).
Florida cuenta con otra playa en la lista, la de St. George Island State Park, en el noroeste del estado, situada en el cuarto puesto, y Carolina del Norte, con otra, Lighthouse Beach, en el sexto puesto, también localizada en la región de los llamados Bancos Exteriores, como la que ocupa el número uno.
Dos playas de Hawai, Duke Kahanamoku (puesto 5) y Wailea (puesto 8), en la islas de Oahu y Maui, respectivamente; una de California, Coronado (puesto 7) en San Diego; una de Carolina del sur , Beachwalker Park (puesto 9), en la isla Kiawah; y una de Massachusetts, Coast Beach Guard en Cape Cod (puesto 10), completan la lista de "Dr. Beach".
Leatherman publica su famosa lista acompañada de espectaculares fotografías de las playas y de sus comentarios acerca de cada una de ellas, y en coincidencia con el fin de semana largo del Memorial Day, el festivo del último lunes de mayo, que en EE.UU. es visto como la apertura oficial de la temporada playera.
Miles de turistas suelen desplazarse a las zonas de playas en todo el país.
De Okrakoke, "una de las playas más salvajes del país", dice que es su favorita para una escapada y de Caladesi que tiene una arena blanca compuesta de cuarzo cristalino que invita a sumergirse en sus limpias aguas.
Para hacer su lista, el especialista dice considerar 50 elementos de una playa, entre ellos no solo la limpieza o la calidad de la arena y las aguas, sino también la presencia de animales salvajes o domésticos, el ruido, la distancia a la que están los automóviles estacionados y el nivel de uso de flotadores y otros objetos inflables por parte de los bañistas.