Nos seguimos en redes sociales pero... ¿somos amigos?

En la era digital las relaciones interpersonales adquirieron nuevas “dimensiones y significados”. Ante esto, una pregunta muy común es si seguirnos en redes sociales implica una verdadera amistad. Para responder a esta incógnita, en el siguiente artículo se exploran distintos aspectos, tanto psicológicos, sociales como también culturales.

Imagen ilustrativa: personas se reúnen y mantienen los celulares en las manos.
Imagen ilustrativa: personas se reúnen y mantienen los celulares en las manos.Shutterstock

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Mañana se celebrará el Día del Amigo en Paraguay y por esta fecha es importante recordar que tradicionalmente, la amistad se ha definido como una “relación afectiva entre dos personas que implica confianza, apoyo mutuo, comprensión y una conexión emocional”.

Sin embargo, con la llegada de las redes sociales esta definición fue puesta a prueba, ya que ahora el término “amistad” puede referirse tanto a relaciones cercanas y profundas como también a conexiones más superficiales y efímeras.

Imagen ilustrativa: redes sociales.
Imagen ilustrativa: redes sociales.

Algunos “factores clave” entre la amistad digital se resaltan la frecuencia y calidad de las interacciones, ya que estas podrían influir en cómo percibimos la amistad con mensajes constantes, comentarios y “me gusta” pueden crear una ilusión de proximidad.

Asimismo, la extensión de la que compartimos detalles personales varía entre el ámbito digital y físico, porque la confianza que generamos al revelar partes de nuestra vida también afectaría la percepción de cercanía.

¿A quién seguimos en redes sociales?

Generalmente uno “sigue” en redes sociales a compañeros de trabajo, conocidos, figuras públicas y amigos cercanos en la misma plataforma, algo que también difumina las líneas entre diferentes tipos de relaciones, es decir, en algunos casos podría haber amistad y en otros no.

Por otra parte, diversos estudios han indicado que las amistades digitales pueden ser significativas, pero no siempre sustituyen las relaciones cara a cara.

El clima agradable se presta para un "after" de celebración previo al Día de la Amistad.
Este año puede darse un "after" de celebración previo al Día de la Amistad.

En referencias a algunas teorías, una propuesta de Edward Deci y Richard Ryan sugiere que las personas necesitan sentir “autonomía, competencia y conexión”. Por otra parte, las redes sociales pueden satisfacer la necesidad de conexión, aunque la profundidad de esta conexión también puede variar.

Otros estudios apuntan que las relaciones en redes sociales pueden tener efectos tanto positivos como negativos:

  • Positivos: las redes sociales pueden ayudar a mantener y fortalecer relaciones a larga distancia, proporcionar apoyo emocional y crear comunidades de intereses compartidos.
  • Negativos: pueden generar una falsa sensación de intimidad, reducir la calidad del tiempo cara a cara y provocar problemas de autoestima debido a comparaciones constantes.

Diferencia entre conexión y amistad

Asimismo, se considera muy importante diferenciar entre “conexión” y “amistad” porque una conexión puede ser simplemente un vínculo en una red social mientras que la amistad implica un nivel mayor de compromiso y reciprocidad.

Por su parte, una amistad verdadera en redes sociales puede ser identificada mediante un apoyo constante, una comunicación profunda y también la reciprocidad entre ambas personas.

Un abrazo entre amigas.
Un abrazo entre amigas.

Como punto final, seguir a alguien en redes sociales no necesariamente equivale a ser amigos en un sentido tradicional pero las plataformas digitales pueden actuar como complementos valiosos para las relaciones interpersonales, ya que pueden facilitar la comunicación y el apoyo.

Finalmente, las verdaderas amistades, ya sean digitales o cara a cara, requieren tiempo, esfuerzo y entendimiento para florecer y perdurar.

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