transporte escolar
El servicio de transporte escolar subió entre 10% y 15% este año, como consecuencia del aumento del precio del combustible, de los repuestos de vehículos y del seguro de transporte, comentó el presidente de la Asociación de Transportes Escolares, Rolando Martínez. Indicó que los padres comprendieron la medida.
El trasporte escolar es uno de los cuatro componentes de la Jornada Escolar Extendida (JEE) implementada por el Ministerio de Educación y Ciencias (MEC) en 300 instituciones educativas del país. Sin embargo, los niños aún tienen que ir a la escuela caminando en las zonas rurales, ya que recién ahora están estudiando a qué localidades llegará este servivio, que no será para el 100% de los estudiantes, supuestamente por falta de recursos.
Rolando Martínez, de la Asociación de Transportistas Escolares, informó este martes que el Viceministerio de Transporte aún no les dio respuesta al pedido de subsidio de combustibles que plantearon para poder operar como unidades de transporte público para hacer frente a la regulada de buses. Explicó que fue el Gobierno el que les hizo la propuesta, pero que hasta ahora no tienen información alguna para avanzar. Afirmó que, pese a que quieren trabajar, no lo harán a pérdida y detalló los dos itinerarios previstos dentro del proyecto.
“Potĩ Mimbi” es el nombre de un lavadero de vehículos que está ubicado en Barrio Obrero. Su propietario, Óscar Piñánez, vio este emprendimiento como una alternativa laboral debido a que se quedó sin ingresos, pues se dedicaba al transporte escolar, uno de los rubros más afectados por la pandemia. El trabajador también ofrece sus servicios a domicilio, entre ellos desinfección de automóviles ante el COVID-19.
Deudas acumuladas, demandas, falta de trabajo y el rechazo del Fogapy son solo algunos de los dramas que atraviesan los 4.000 miembros de la Asociación de Transporte Escolar del Paraguay. Desde el 11 de, marzo, cuando arrancó la suspensión de clases presenciales, los trabajadores del volante tratan de ingeniarse vendiendo productos alimenticios en empleos informales.
El gobernador del Alto Paraná, Roberto González Vaesken, insistió en que se deben apurar las medidas para los afectados por la paralización comercial de esta zona del país a causa de la pandemia del COVID-19. El ejecutivo departamental recibió hoy a un grupo de dirigentes de trabajadores del volante que se manifestaron para exigir créditos blandos o subsidio.