15 de abril de 2025
En el corazón de un país donde la salud pública se desangra lentamente, la educación agoniza en el abandono y la falta de medicinas transforma los hospitales en lúgubres antesalas de la muerte, el Gobierno, atrapado en una amnesia insólita, impulsa desde el Congreso la compra de aviones de guerra.
El presidente de la República, Santiago Peña, anunció su autorización para la firma del contrato de préstamo para adquirir aviones que serían los seis “A-29 Super Tucano” vendidos por Brasil. Según el mandatario, estas aeronaves serán “esenciales para fortalecer nuestra defensa aérea y enfrentar al narcoterrorismo”
La Cámara de Senadores autorizó ayer la salida del país de oficiales, suboficiales, tres aviones Tucano y un avión casa 212 para un ejercicio militar en Brasil. Senadores cartistas destacaron que esta es la primera vez que el Paraguay participará con aviones y no como simple observador.
Santiago Peña resaltó hoy el papel de las Fuerzas Armadas (FF.AA.) y anunció la “histórica” inversión de US$ 500 millones durante su administración, para fortalecer el sector de seguridad y defensa. El plan comprende la compra de seis aviones Super Tucano del Brasil por US$ 100 millones. El mandatario presidió ayer el acto de conmemoración del aniversario 179° de la creación de la institución castrense.
Ha pasado ya casi una década desde la promulgación de la Ley 5.400 “De Vigilancia y protección del espacio aéreo paraguayo”. Desde entonces no avanzamos mucho la materia. Ahora, con la inminente compra de los Super Tucanos, vuelve al tapete la discusión sobre la modificación o no de la normativa para habilitar el derribo de aviones sospechosos. Se trata de un debate cuyo cambio podría poner en entredicho a Paraguay frente a la comunidad internacional y en riesgo a la población civil paraguaya.
El Estado paraguayo pretende la compra de aviones Super Tucano para la Fuerza Áerea, con una inversión de U$S 96 millones. Sobre el punto está en discusión si se usarán o no para el derribo de aviones pertenecientes a narcotraficantes que vuelen sobre nuestro territorio. “En el sistema que nosotros vamos a implementar es lo último de lo último. Si nosotros derribamos un avión sin más trámites, lo primero que vamos a hacer es impedir que se tengan elementos de juicio para continuar con una investigación”, expresó el ministro de Defensa, Óscar González.