Con la intensificación de la producción avícola, la necesidad de contar con agua abundante, y principalmente de calidad, es indispensable, y la doctora Belén Zárate, explica más sobre el punto.
El estatus sanitario en cuanto a la producción avícola en el Paraguay es óptimo, según Gladys Riquelme, directora de Programas Sanitarios del Senacsa. Paraguay, libre de la enfermedad conocida como Newcastle, camina a la certificación de país libre de influenza aviar.
Molino San Juan SRL, una empresa constituida en 1963 por Eusebio Tadeo Gómez, inició como productora de alimentos balanceados para consumo animal. Desde 1970 inicia la producción de pollos parrilleros y, en 2003 pone en marcha una moderna planta frigorífica en la ciudad de Itá, dando inicio a su marca Pollos Don Juan.
La situación económica en cuanto a la producción de huevos a nivel local “está mejor que el año pasado”, según el productor industrial Adolfo Koo. Indicó que la reducción del precio del maíz, principal alimento de las aves, en un 25% favoreció notablemente a la industria.
Granja Avícola La Blanca sigue con la producción de alimentos debido a que “es una de las actividades imprescindibles que no baja la guardia”, según Blanca Ceuppens, presidenta de la empresa. Llega al mercado local y a 25 países a nivel internacional con su marca Pechugon. Este año, exportó 6% del total de su producción, lo que representa 3 millones de kilos de carne de aves y menudencias.
La vigilancia epidemiológica está estructurada principalmente en los componentes activos y pasivos que permiten determinar el estado epidemiológico de la población aviar en general, a través de muestreos representativos y un sistema de alerta en la población avícola para detección precoz de un evento. Esta actividad es desarrollada por el Senacsa.