Jóvenes de la Pastoral Juvenil Nacional dieron a conocer un manifiesto tras la peregrinación a Caacupé que se realizó hoy, en el que cuestionan duramente el sistema educativo de Paraguay. La “educación pública nos condena a la pobreza”, afirmaron. Asimismo, calificaron de criminal la corrupción y lamentaron que Paraguay se haya convertido en centro de criminalidad y de narcopolítica. En el ámbito de la salud, afirman: “Seguimos reprobados como sociedad y como gobierno”.
El obispo de Caacupé, Mons. Ricardo Valenzuela, anunció que las misas se harán a puertas cerradas y sin fieles, que el Tupay Ycuá permancerá cerrado y que los fieles quedan dispensados del cumplimiento de las promesas de forma física.
El secretario general de la Conferencia Episcopal Paraguaya (CEP), Monseñor Amancio Benítez, dijo que si el Gobierno no decreta una cuarentena total por la Pandemia del coronavirus, sería casi imposible evitar que los fieles de la Virgen de Caacupé se trasladen hasta la Villa Serrana.
Con respecto a quiénes serán los responsables de un eventual contagio masivo en el entorno de las esta festividad religiosa, el ministro de Salud, Julio Mazzoleni, afirmó que si bien su cartera sanitaria tiene la mayor carga, “todos somos responsables de las actividades que estamos llevando a cabo”.
Autoridades presentaron este miércoles el protocolo sanitario y de seguridad para la fiesta de la Virgen de Caacupé de este año. Los fieles deberán agendarse para participar de las diferentes actividades a través de una página web que se habilitará el próximo 10 de noviembre.
El viceministro de Salud, Julio Rolón, dijo que -si bien aprobaron un protocolo para la festividad de Caacupé- es mejor que los creyentes celebren la fecha de manera espiritual y desde sus casas. “Como representante de Salud apelo a que la gente no venga”, indicó. El médico afirmó que esto será “un gran examen de conciencia social”.