17 de julio de 2025
Un juzgado de lo laboral del primer turno hizo lugar a una acción de amparo constitucional presentada por vecinos del barrio Zárate Isla de Luque, quienes denunciaron la instalación irregular de una planta hormigonera en una zona residencial.
El concejal cartista y precandidato a la Intendencia de Luque, Arnaldo Baeza adelantó que el oficialismo luqueño está analizando nuevamente el proyecto de tercerización de cobro de impuestos en Luque. Dijo que ya hubo conversaciones con el Ejecutivo Municipal para impulsar la iniciativa. En la ciudad ya se había implementado el sistema tercerizado en mayo del 2017, pero, tras una serie de cuestionamientos ciudadanos, se debió recular y los contribuyentes tuvieron que pagar una millonaria indemnización a la firma adjudicada.
Vecinos del barrio Zárate Isla de Luque denuncian que la construcción de la hormigonera en la zona continúa normalmente. Esto, incluso cuando la Junta Municipal encomendó al intendente, Carlos Echeverría (ANR-HC), que suspenda los trabajos. Direcciones de la Municipalidad se contradicen sobre la condición de residencial del área donde se está instalando la fábrica.
La Junta Municipal de Luque decidió este martes encomendar al intendente Carlos Echeverría la suspensión de la construcción de una planta hormigonera en la compañía Zárate Isla de esa ciudad. La obra generó el fuerte rechazo de los vecinos, por tratarse de una zona residencial.
Merced a un pacto, concejales colorados y liberales aliados al cartismo aprobaron, sin mucho análisis, la rendición de cuentas del intendente de Luque Carlos Echeverría (ANR-HC) pese a que el mismo no contestó varias consultas y no entregó documentos respaldatorios solicitados por la única edil que rechazó el informe. El intendente administra un presupuestó anual de G. 111 mil millones, pero la ciudad proyecta una vergonzosa imagen de desidia, debido a la gran cantidad de baches, el tránsito caótico, basura y aguas servidas.
La construcción de una hormigonera en plena zona residencial de la compañía Zárate Isla mantiene en “pie de guerra” a los vecinos del lugar. Sospechan de irregularidades en el proceso de otorgamiento de la Declaración de Impacto Ambiental por el Mades.