19 de octubre de 2025
En un mundo que parece girar cada vez más rápido, encontrar momentos de calma y claridad es vital para nuestro bienestar mental y físico. La meditación se ha revelado como una práctica milenaria extremadamente beneficiosa, accesible para todos y, lo mejor de todo, posible de realizar desde la comodidad de nuestro hogar.
En la era de la distracción constante, el concepto de mindfulness ha ganado popularidad como una herramienta eficaz para mejorar la calidad de vida. Sin embargo, uno de los aspectos menos explorados de esta práctica es su aplicación en la intimidad, especialmente en la vida sexual.
La salud mental es un aspecto crucial del bienestar general y afecta cómo pensamos, sentimos y actuamos en la vida diaria. Con la creciente presión y el ritmo acelerado del mundo moderno, cuidar de nuestra salud mental es una prioridad que no se debe pasar por alto.
La psicóloga Nair Carolina Martínez Rolón afirma que “Mindfulness”, es una interversión complementaria a la terapia, pero no la reemplaza. “Es un entrenamiento en atención plena, es prestar atención de manera consciente momento a momento con intensión, curiosidad, sin juzgar, con aceptación y amabilidad. Y esto te permite tomar decisiones que mejoren tu salud mental y bienestar”.
BARCELONA. Un estudio internacional ha aportado por primera vez evidencia científica que demuestra que llevar a cabo una intervención con meditación de tipo “mindfulness” (conciencia o atención plena), combinada con actividades de expresión artística y terapia psicológica, implica beneficios en adolescentes que hayan sufrido experiencias traumáticas.
Hoy en día tanto la meditación como el mindfulness han comenzado a incorporarse en la vida de muchas personas. ¿En qué consisten? ¿Son lo mismo? ¿Cuál es más conveniente para cada persona? La instructora de Hatha Yoga, Yoga Terapeútico y Yoga para Infancias, Marcia Videla Ayala, nos habla del tema.