11 de abril de 2025
Organizaciones vecinales de Asunción reclamaron formalmente al MOPC el cumplimiento de las obras compensatorias en el Jardín Botánico, a las que se había comprometido en 2017. Ante la Junta Municipal de Asunción, representantes del Ministerio, se centraron solamente en las obras pendientes sobre la avenida Artigas.
El Jardín Botánico se encuentra prácticamente abandonado por las autoridades municipales y centrales. Casas históricas en mal estado, yuyales, escasa iluminación y poca seguridad son las características de este sitio histórico.
Una representante de un grupo ciudadano denunció el estado de abandono en que se encuentra el Jardín Botánico de Asunción, carente de seguridad y atestado de “basurales”, mientras las autoridades incumplen sus compromisos de restauración y conservación del espacio y sus edificios históricos.
El desastroso estado del Jardín Botánico y Zoológico de Asunción no desentona con el de la ciudad cada vez más estropeada por el inepto intendente Óscar “Nenecho” Rodríguez (ANR, cartista) y sus serviciales ediles, pese a las intervenciones “urgentes” de dicho sitio recreativo dispuestas por la Junta Municipal en dos ocasiones pero ignoradas por el intendente. Es de recordar que existe un convenio firmado el 21 de junio de 2017, entre el entonces intendente asunceno, Mario Ferreiro, y el titular del MOPC de la época, Ramón Jiménez Gaona, donde acordaron realizar varias obras en el Botánico y revitalizar la avenida Artigas a costa del Ministerio, por la cesión de una parte de las tierras por la Municipalidad para construir el viaducto del lugar. Las obras se iniciaron y quedaron inconclusas. En julio de 2023, la Junta Municipal recordó el convenio y encargó a la Intendencia que demande al MOPC por el incumplimiento de nada menos que veinte obras entre otras cosas incluidas en el convenio de cooperación. Esta es la hora en que Nenecho no se ha dignado a cumplir con el mandato.
Las inmediaciones del Jardín Botánico de Asunción son consideradas “zona roja”. Los vecinos relataron que constantemente se registran asaltos y ni los conductores de plataformas quieren parar en esa zona, por temor a ser víctimas de la delincuencia. Incluso dentro del parque, en la abandonada caseta de seguridad se dejó una advertencia para los visitantes: “Cuidado, zona de robo”.