La Seprelad, a través de su burda respuesta a un pedido de información pública, citó a la DNIT y el BCP como aportantes en su totalidad de dos de los nueve ítems de servicios para el último pleno de Gafilat. Lo llamativo es que en el portal web de Contrataciones Públicas no figuran licitaciones de estas dos entidades públicas, que ahora deberán explicar vínculos con la desprolija organización del ente antilavado.
El margen internacional estipula un régimen de sanciones financieras a fin de cumplir con las Resoluciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (NN.UU.), que se corresponden a la prevención y contención a hechos del terrorismo y su financiamiento. Es por tanto que se han establecido resoluciones que exhortan al congelamiento sin demora de aquellos fondos y/o activos que ocupan un fin ilícito.
Un grupo impulsor compuesto por varias organizaciones emitió un comunicado en el que solicita a la Cámara de Diputados rever la propuesta de ley de control a las organizaciones sin fines de lucro (OSFL).
Resulta loable precisar (a modo científico-jurídico), la pertinencia de la sociedad de riesgo, ante las diversas actividades jurídicas que rigen un sistema social. En tal sentido, el factor internacional ha dimensionado un parámetro de riesgos e inclusión financiera, bajo los vértices de las “Recomendaciones” 22º y 23º del Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI).
Gran retroceso en los esfuerzos por mejorar la imagen del país. Hay una cuestión de suma importancia que no se está teniendo en cuenta en relación con los últimos acontecimientos en el ámbito político-institucional. En 2022 Paraguay se salvó por muy poco de entrar en la “lista gris” de países no cooperantes con la lucha internacional contra el lavado de activos y financiamiento al terrorismo, pero quedó oficialmente “bajo vigilancia” del Grupo de Acción Financiera Internacional Latinoamericana (Gafilat). Los hechos que han venido sucediendo guardan relación directa con los aspectos en observación y dejan al país en una posición muy comprometida en el marco del “seguimiento intensificado” al que está sometido, con potenciales graves consecuencias.
Indisputablemente, los últimos lineamientos absorbidos nos exhortan a una inminente referencia respecto a la interconexión con el estadio internacional, pues bien, hemos de reconocer que toda “cooperación” internacional resulta “vital” en la lucha contra los diversos delitos económicos, como el lavado de activos, la corrupción (en su generalidad), y el fraude financiero desde los diversos aspectos de la sociedad de riesgo.