6 de septiembre de 2025
La lectura y correcta utilización de los mapas está vinculada con el conocimiento de los elementos básicos que lo componen, y, entre ellos se encuentran las líneas imaginarias. Estas líneas que son convencionales (es decir, sus parámetros son iguales en todas partes del mundo) junto con los puntos cardinales son fundamentales para la ubicación en el espacio geográfico.
La geografía, como se sabe, nos puede hacer incurrir en errores elementales. Véase esto: paseando Ud. por Alemania, por ejemplo, puede hallarse en la necesidad de ir de Repente a Kagar. Repente es una localidad cercana a Kagar, que se halla en el municipio de Rheinsberg (Brandeburgo). También podrá verse obligado a tener que desviar su itinerario, si pretende evitar Kagarsee antes de llegar; o sea, no tener que pasar por el lago de Kagar, que así se llama. El barrio de Kagada, sin embargo, y pese a lo que pueda esperarse, no está por ahí cerca sino en la ciudad de Gyoda, un tanto al norte de Tokio.
En el colegio la Geografía era de las asignaturas terroríficas. Reclamaba mucha memoria y ojo preciso para el globo terráqueo, mapa o planisferio. Lidiábamos con cadenas, mesetas, macizos, montañas y picos; océanos y mares, con sus golfos, bahías, radas, penínsulas, cabos, estrechos y archipiélagos; sin soslayar ríos y lagos, llanuras y sabanas, desiertos, tundras y taigas; cada uno con su nombre propio y ubicación.