Los aumentos que pretenden autoasignarse los parlamentarios constituyen una desconsideración e irresponsabilidad, señaló en forma categórica el economista y exministro de Hacienda, Dionisio Borda.
Economistas y analistas coinciden en que el presupuesto de la Nación 2022 sancionado por el Congreso la semana pasada, dentro de todo, será manejable para el Ministerio de Hacienda, porque mantiene el plan de convergencia del déficit fiscal en un 3% del PIB. Sin embargo, criticaron los incrementos salariales que engrosan los gastos rígidos en estos tiempos críticos y, sobre todo, que se hayan direccionado recursos de medicamentos para estos fines.
El ministro de Hacienda, Santiago Peña, manifestó ayer su preocupación ante el aumento de los gastos rígidos durante el estudio del proyecto de presupuesto 2016 en el seno de la Comisión Bicameral de Presupuesto del Congreso.
El aumento de los cargos en las diferentes instituciones públicas de manera constante y, por ende, de los gastos considerados rígidos llevó a la administración central a cerrar de nuevo el ejercicio pasado con un déficit fiscal de 1,9% del PIB, según señaló ayer el ministro de Hacienda, Germán Rojas.