23 de septiembre de 2025
El 31 de diciembre de 2024, Fátima Saucedo -fotógrafa echada de Yacyretá por planillerismo en 2022- dejó a su perro Pepi en una veterinaria para unos estudios que no requerían internación, se fue de viaje y lo retiró 21 días después, tras una denuncia presentada ante la Fiscalía por abandono. La Fiscalía concluyó que no hubo delitos y solicitó la desestimación de la denuncia, dispuesta hoy por un juzgado penal.
El director jurídico de la Entidad Binacional Yacyretá (EBY), Juan Carlos Duarte, aseguró que Fátima Saucedo, hoy suspendida por un supuesto caso de planillerismo, ya no forma parte del plantel de funcionarios, así como tampoco seguirá cobrando su salario.
El médico forense, Pablo Lemir, quien encabezó la auditoría a los certificados médicos presentados por la presunta planillera de la Entidad Binacional Yacyretá (EBY), Fátima Saucedo, confirmó una serie de irregularidades en los reposos.
La Entidad Binacional Yacyretá (EBY) decidió suspender a la funcionaria Fátima Saucedo Zelada debido a que se detectaron supuestas irregularidades en las numerosas ausencias de la misma a su lugar de trabajo. Además, un perito médico confirmó la existencia de incongruencias en los justificativos presentados por la misma. Ahora se inicia el proceso judicial para el despido justificado debido a la antigüedad de la misma.
Fátima Saucedo merece que su nombre se publique y quede registrado porque resulta asombroso, grotesco, ofensivo y lamentable que dicha persona se encuentre defendiendo su inconducta a costa de los contribuyentes en lugar de presentar inmediatamente su renuncia, como se estila cuando alguien es pillado “con las manos en la masa”.