12 de diciembre de 2025

El ministro de la Corte Suprema de Justicia Eugenio Jiménez Rolón, uno de los seis miembros de la máxima instancia judicial que tuvieron recientemente una llamativa reunión con el presidente Santiago Peña - de la que tres ministros fueron excluidos –, afirmó hoy que el encuentro se hizo a pedido de los ministros para tratar planteamientos “puramente administrativos”. No hizo referencia a la supuesta presencia en la reunión del presidente del Partido Colorado, Horacio Cartes.



En una sesión “exprés” el pleno de la Corte Suprema de Justicia no trató el cambio del ministro Eugenio Jiménez Rolón como representante del máximo tribunal ante el Consejo de la Magistratura (CM). Ni el vicepresidente segundo de la máxima instancia judicial ni el ministro Alberto Martínez Simón participaron de la reunión.

El titular del Consejo de la Magistratura, Óscar Paciello, se dijo alarmado por los rumores de que ministros de la Corte Suprema quieren reemplazar a Eugenio Jiménez Rolón como su representante ante ese cuerpo, a pesar de que su período en el cargo aún no termina. Esto ocurre cuando el Consejo está en proceso de elegir una terna de candidatos para ministro de la Corte.

El senador Pedro Santa Cruz (Frente Guasu) afirmó que la intención de cambiar al ministro Eugenio Jiménez Rolón del Consejo de la Magistratura (CM) forma parte de un esquema del cartismo para copar los cargos en el Poder Judicial. Denunció que el ministro Alberto Martínez Simón pretende heredar la estructura de Antonio Fretes.

Los mismos ministros de la Corte Suprema de Justicia que impusieron al Dr. Eugenio Jiménez Rolón la vicepresidencia segunda del máximo tribunal estarían maniobrando ahora para sacarlo del Consejo de la Magistratura y designar como representante a un leal. Jiménez Rolón admitió la posibilidad de su cambio, pero resaltó que sería “muy forzado”.

El cambio de postura del ministro Eugenio Jiménez Rolón, quien luego de rechazar su designación en la vicepresidencia 2ª de la Corte Suprema de Justicia terminó aceptando el cargo, generó todo tipo de críticas, sobre todo por la presunta injerencia política en las elecciones en el máximo tribunal. La activista anticorrupción María Esther Roa aseguró que el caso evidencia un “apriete de fuerzas externas en el Poder Judicial”.