21 de octubre de 2025
La condenada a 3 años y seis meses de cárcel por estafa, en el caso “UNA no te calles”, María del Carmen Martínez, más conocida como la “comepapeles”, sufrió un revés en su intención de obtener salidas transitorias de la cárcel. El juzgado de Ejecución a cargo de la causa dispuso que la encausada sea sometida a tratamiento psicológico y que colabore en la instalación de la biblioteca del Complejo para Mujeres Privadas de Libertad de Emboscada (COMPLE).
La mafia de los pagarés dejó un tendal de víctimas en todo el país que sufren descuentos ordenados en reclamo del pago de compromisos ya cancelados o que superan con creces las deudas originales. La acusación presentada con relación a las irregularidades detectadas en el juzgado de Paz de la Catedral, 2° turno, revela casi una veintena de remates decretados en juicios espurios.
Los requerimientos conclusivos presentados por la Fiscalía en el caso “mafia de los pagarés” exponen los entretelones de la operativa de los juzgados para llevar adelante cientos de juicios impulsados en forma masiva por empresas crediticias. Millonarios pagos semanales que llegaban hasta la jueza, control con cámaras y micrófonos y las empresas “mimadas”, fueron revelados por los funcionarios.
La gerente de Prestaciones Económicas del Instituto de Previsión Social comentó que la previsional investiga casos “sospechosos” entre las aseguradas que recibieron subsidios por reposos médicos por maternidad entre 2020 y este año, ante la posibilidad de que haya hechos de estafa similares a los detectados en el sistema de compensaciones por suspensión de contratos laborales durante la pandemia de covid-19.
La fiscala Teresa Sosa hizo una explicación de cómo funcionó un supuesto esquema de estafa por medio del cual una empresa presuntamente causó un perjuicio patrimonial de más de 1.200 millones de guaraníes al Instituto de Previsión Social contratando a “empleados” que habrían cobrado de forma fraudulenta compensaciones por suspensión de contrato durante la pandemia de covid-19.
Durante la pandemia por covid-19, un hombre creó una firma de fantasía, inscribió en el Instituto de Previsión Social (IPS) a 83 personas como sus trabajadores, pese a que nunca trabajaron para él. Esto, para acceder a indemnizaciones por cesación laboral o cierre forzoso de la empresa. Ahora, tanto el supuesto empresario como los falsos trabajadores fueron imputados por una millonaria estafa a la previsional.