Cada vez más mujeres lucen con orgullo sus canas y se rehusan a someterse a tratamientos antiarrugas. Forman parte del movimiento de “envejecimiento positivo”.
REDACCIÓN CIENCIA. Hay personas que dicen haber notado un bajón repentino con cierta edad, una sensación de que todo el cuerpo se deteriora a la vez. Ahora, un nuevo estudio encuentra una posible explicación científica: muchas de nuestras moléculas y microorganismos aumentan o disminuyen drásticamente alrededor de los 40 y los 60 años.
Una dieta rica en vitaminas y minerales, sobre todo la mediterránea, pero especialmente sin mucho azúcar añadido, se relaciona con una edad biológica más joven a nivel celular, según un estudio que publica hoy Jama Network Open.
A medida que pasa el tiempo, mantenernos bien hidratados se vuelve más esencial que nunca para la salud y la belleza de nuestra piel. Curiosamente, algunas bebidas pueden acelerar el proceso de envejecimiento al quitarle la humedad vital a la piel y al cuerpo.
BOGOTÁ. “¿En qué momento ser vieja se tornó razón de vergüenza para la mujer, en qué momento la palabra vieja es una grosería y tenemos que usar eufemismos?”, plantea la sexóloga Flavia dos Santos, para quien es “encarcelante ser mujer después de los 50 años” y hace un alegato por la libertad y la sexualidad de “las viejas”.
MADRID. Un equipo de investigadores del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) de Madrid (España) ha descubierto en modelos animales que cuando las células creen tener exceso de nutrientes, el envejecimiento se acelera y la vida se acorta, pese a llevar una dieta normal.