La expresión fue acuñada por el feminismo en la década de 1970 y se refiere al conjunto de creencias, ideas y actitudes que justifican y normalizan la violencia sexual y que, según la ONU, es “omnipresente”.
Islamabad, 15 feb (EFE).- La decisión de un tribunal paquistaní de absolver al hermano y asesino de la joven estrella de internet Qandeel Baloch, en un “crimen de honor”, desató este martes la indignación de los grupos más progresistas en el conservador Pakistán, que tachan de “vergonzosa” la medida.
«La idea es sencilla y eficaz: lujuria femenina, no convicciones políticas; caprichos sexuales, no principios éticos; locura, no lucidez», escribe Montserrat Álvarez acerca de la campaña de difamación con la que el FBI destruyó la imagen de Jean Seberg, «musa de la Nouvelle Vague».
Sobre la función ideológica del Día de la Mujer: dar a lo inexistente realidad e imagen, no importa si sexista y anticuada o «revolucionaria» y «transgresora», si oscuro objeto de deseo machista o icono feminista, y ponerla en un altar que siempre es disfraz de un molde.
El sábado 28, la española Paula Dapena (24) se negó a participar del minuto de silencio en homenaje al recientemente fallecido futbolista argentino Diego Armando Maradona antes de un partido amistoso en La Coruña. Su imagen, sentada de espaldas al público, ha dado la vuelta al mundo.
Este mes se cumplen cuatro años del asesinato de la influencer paquistaní Qandeel Baloch. Una investigación sobre su historia se acaba de lanzar en Estados Unidos.