17 de noviembre de 2024
Imagínese vivir en un vecindario inseguro, como tantos de Paraguay, donde de repente le salen al paso dos niños que -con pinceles y témpera en mano- intentan robarle una sonrisa. Es lo que hacen dos niños, de 7 y 4 años, del barrio Mburukuja de Asunción, quienes regalan su arte -tiernos trazos plasmados en un papel- a los vecinos que pasan por su vereda, para “hacer que se sientan más seguros”.