7 de mayo de 2025
En este 2022 se cumple 30 años de vigencia de la Constitución Nacional jurada en el año 1992 y con la cual se pretendió dejar atrás los vicios del gobierno autocrático de Alfredo Stroessner y que, pese a su imperfecto cumplimiento, ha sido herramienta a veces para privilegiar, otras para detener proyectos políticos que encontraron defectos en su redacción o vacíos en su interpretación, pero que a todas luces sigue siendo un texto de escaso conocimiento y representatividad para la mayoría de los paraguayos.
El abogado José Casañas Levi sostiene que la propuesta del diputado Édgar Ortiz (PLRA) de establecer este tipo de condena por esta vía no tiene legalidad. Asimismo se pronunció en su cuenta de Twitter el colega de Ortiz, Édgar Acosta, dejando en claro que sólo se puede dar curso al referido planteamiento a través de una reforma de la Constitución.
Desde el fin de la dictadura stronista, en 1989, pero mucho más a partir de la vigencia de la Constitución de 1992, se hablaba de la necesidad de un gran pacto de todas las fuerzas políticas de nuestro país con el objetivo de crear condiciones para que, cualquiera fuera el partido en el poder, hubiese principios elementales que todos respetasen para lograr cierto nivel de desarrollo nacional y evitar inestabilidad o regresiones en nuestro proceso democrático.