La doctora en animales Violeta Pereira nos dice que los conejos son animales crepusculares por naturaleza, es decir, ellos tienen una actividad cuando amanece, cuando empieza a salir el sol y después descansan y vuelven al atardecer. “Los conejos son extremadamente limpios, cariñosos y juguetones. Son curiosos y limpios como los gatos y cariñosos como los perros. Esto los hace las mascotas ideales para niños mayores de 8 años y adultos”.
Los conejos comen sin parar y eso está bien. Por un lado porque tienen que comer regularmente para hacer funcionar su sistema digestivo y por otro, porque necesitan roer para desgastar los dientes, que no paran de crecer durante toda su vida.
El estrés afecta el sistema inmunológico del conejo del mismo modo que ocurre con los seres humanos. Los dueños pueden evitar que su conejo se resfríe si lo somete lo menos posible a situaciones que le puedan provocar estrés.
Los saltos de valla son una buena afición para que los conejos estén entretenidos y se mantengan ágiles. La actividad recibe el nombre de Kaninhop. Muchos dueños lo hacen con ellos en casa, y hay otros que incluso los llevan a competiciones.
La mayoría de los conejos se acostumbran a utilizar la bandeja sanitaria. Su uso ayuda a mantener más limpia la jaula y a su vez permite que la mascota pueda andar suelta por la casa sin ensuciar.
Los conejos domésticos pueden padecer enfermedades de origen muy diversos y para prevenirlas se les mantiene en un lugar tranquilo, higiénico; con buena alimentación y control sanitario.