Durante los primeros días de noviembre, el cementerio municipal de Encarnación recibe entre 10.000 y 15.000 personas, que se acercan a conmemorar a sus familiares fallecidos. Actualmente, el predio está totalmente lleno, y no se alquilan más terrenos, por lo que los nuevos entierros se realizan en otro camposanto de la ciudad, según informaron los encargados.
La muralla perimetral del futuro cementerio municipal de Limpio se cae a pedazos. La obra fue ejecutada por la empresa del tío del concejal Luis Vidallet Ferreira (PLRA), RF Construcciones, cuyo propietario es Regino Ferreira, hace apenas tres años por G. 351 millones. El cercado presenta grandes grietas, lo que revela la pésima calidad de la obra y de los materiales utilizados.