La Cámara Paraguaya de Procesadores de Oleaginosas y Cereales (Cappro) hizo hincapié este miércoles en que si bien la agroindustria es uno de los pilares de la economía nacional, aún está lejos de aprovechar todo su potencial. Reclamó nuevamente la implementación de políticas industriales que permitan el fortalecimiento de las aceiteras y la ampliación de su impacto en el desarrollo del país.
La Cámara Paraguaya de Procesadores de Oleaginosas y Cereales (Cappro) lamentó que el procesamiento de oleaginosas se haya frenado en noviembre, dato con el que se cumplió la previsión de caída para la molienda, que cierra el año con una baja del 7%. Con las aceiteras registrando un nivel de ociosidad en torno al 40% de su capacidad instalada, ante la casi nula disponibilidad de materia prima (soja), instaron al diseño de una política que fomente la industrialización local.
La Cámara Paraguaya de Procesadores de Oleaginosas y Cereales (Cappro) lamentó que el procesamiento de oleaginosas se haya frenado en noviembre, dato, con el que se cumplió la previsión de caída para la molienda, que cierra el año con una baja del 7%. Con las aceiteras registrando un nivel de ociosidad en torno al 40% de su capacidad instalada, ante la casi nula disponibilidad de materia prima (soja), instaron al diseño de una política que fomente la industrialización local.
La Cámara Paraguaya de Procesadores de Oleaginosas y Cereales (Cappro) dio a conocer que las plantas aceiteras están anticipando la suspensión de sus actividades este año, pese a la gran producción de soja de la campaña agrícola 2023/2024, que superó las 10,5 millones de toneladas. El sector enfrenta una crisis debido al deterioro de sus condiciones de competitividad.
Desde la Cámara Paraguaya de Procesadores de Oleaginosas y Cereales (Cappro) analizaron qué les espera a las aceiteras en 2025 y adelantaron que el panorama resulta complejo debido a la falta de consolidación de una política industrial, que otorgue incentivos para seguir apostando al procesamiento de la materia prima, en este caso la soja. Lamentaron que se cierre el año con una caída del 10% en el nivel de molienda.
La Cámara Paraguaya de Procesadores de Oleaginosas y Cereales (Cappro) dio a conocer que las plantas aceiteras están anticipando la suspensión de sus actividades este año, pese a la gran producción de soja de la campaña agrícola 2023/2024, que superó las 10,5 millones de toneladas. El sector enfrenta a una crisis debido al deterioro de sus condiciones de competitividad.