Al parecer los adulones hicieron hasta lo imposible para conseguir una “invitación especial” para que Santi Pet también aparezca entre los invitados a la asunción de Donald Trump, que al final fue un convite del Congreso y no de instituciones del Gobierno.
De a poco nos estamos enterando quiénes están mejor en el país de Santítere. Y no se necesita ir a estudiar a Chicago como el “profesor doctor”. Basta con ponerse un pañuelo colorado al cuello y conseguir un “padrino” medianamente importante.
El “Patrão”, Santítere y sus “apóstoles” se las dan de democráticos gua’u y sacan pecho ahora ante la reasunción de su exaliado Maduro.
Santítere estuvo supertibio ayer en sus declaraciones sobre dos temas claves: el asesinato de Correa Galeano vinculado al magnicidio del fiscal Marcelo Pecci y la dictadura de Nicolás Maduro.
Lágrimas de “cocodrillo” derramaron varios de los fiscales por Marcelo Pecci, pero no movieron un dedo para identificar quién o quiénes son los autores intelectuales de su asesinato.