1 de junio de 2025
El cambio climático es un fenómeno que está alterando de manera drástica e irreversible muchos de los paisajes naturales más icónicos del mundo. Estos cambios no solo impactan la biodiversidad y el clima local, sino que también amenazan con hacer que algunos destinos turísticos sean inaccesibles o irreconocibles en un futuro no muy lejano. ¿Cuáles?
La Organización Internacional del Trabajo (OIT) en su informe titulado “Trabajar en un planeta más caliente: el impacto del estrés térmico en la productividad laboral y el trabajo decente” reflexiona sobre el cambio climático y los efectos adversos que genera el aumento progresivo de las temperaturas en múltiples sectores económicos, lo que afecta la productividad laboral y la estabilidad del mercado de trabajo.
Estudio revela que la norma de 2020 que estableció la obligación de reducir las emisiones de óxido de azufre en el transporte marítimo pudo haber contribuido en el aceleramiento del calentamiento global.
Un aumento de la temperatura media global de entre 3 y 4 grados (respecto a niveles preindustriales) a finales de siglo causaría 2,3 millones de muertes adicionales en Europa a consecuencia del calor, y la peor parte se la llevarían ciudades españolas, como Barcelona, Madrid o Valencia.
Los glaciares experimentaron en 2023 la mayor pérdida de masa registrada desde que hay registros, y en 2024 la temperatura media global -que sobrepasó en 1,5 °C los niveles preindustriales- amenaza su futuro y la seguridad hídrica de millones de personas además de alterar ecosistemas.
En los últimos 40 años, las sequías graves se han hecho cada vez más largas, intensas y extremas y todo apunta a que en el futuro se producirán más episodios plurianuales (pueden durar años o décadas), que suponen una grave amenaza para los ecosistemas, la agricultura y la producción energética.