16 de noviembre de 2024
Tras un año de suspensión de las peregrinaciones, los devotos de la Virgen de Caacupé pudieron retornar a la casa de la madre común de los paraguayos. Fue una festividad especial debido a la pandemia del covid-19 y sus consecuencias; más que nunca los promeseros buscaron consuelo y esperanza al llegar ante el altar de Tupãsy Caacupé.