14 de noviembre de 2025

El obispo de Caacupé, monseñor Ricardo Valenzuela, presidió la misa central en la Basílica y aseguró que “vivimos un Halloween diario de violencia, miedo y pérdida de valores”. Invitó a los fieles a mirar con esperanza el presente del país, marcado según dijo por el olvido de los valores humanos y cristianos.





Con miras a la Fiesta de la Virgen de Caacupé, autoridades locales y eclesiásticas pusieron en marcha la primera reunión de coordinación del Operativo Caacupé 2025, un esfuerzo conjunto que cada año permite organizar la llegada de miles de peregrinos a la Capital Espiritual del Paraguay.

Caacupé. En un mensaje duro y sin rodeos, el presbítero Víctor Luis Cabañas, director del Canal Católico Ñandejara Ñe’ẽ , denunció durante la misa en el santuario de Caacupé que la justicia paraguaya está debilitada por la corrupción y sometida a los intereses políticos y económicos. Señaló que jueces y fiscales, que deberían ser los garantes de la equidad, por presión se convierten con frecuencia en cómplices de negociados que atentan contra el pueblo.

El presbítero Rubén Ojeda, rector de la Basílica de Caacupé, informó sobre el proyecto de revitalización del principal santuario mariano del país, de cara a la próxima festividad de la Virgen. Resaltó que ya se empezó el trabajo en el jardín y que cada obra se desarrolla con el acompañamiento y la ayuda de la gente que colabora con sus aportes.

Monseñor Celestino Ocampo, obispo de la Diócesis de Carapeguá, recordó que el verdadero seguimiento de Cristo implica autenticidad, compromiso y la disposición de cargar con la cruz. “Jesús no nos dice: síganme y todo estará mejor. Él habló siempre con claridad de las renuncias y cruces que hay que cargar”, remarcó. Fue durante la misa central en el Santuario de la Virgen de los Milagros de Caacupé.

El presbítero César Nery Villagra criticó a quienes buscan siempre ocupar los primeros lugares para gozar de privilegios y cortesía. Señaló que muchos aparentan humildad mientras ascienden, pero luego la abandonan, olvidando que los valores de la fe no se pueden fingir ni usar como escalera al poder. Fue en la misa central en el santuario de Caacupé.