24 de agosto de 2025
El desarrollo económico de un país depende en gran medida de la calidad de su capital humano. En tal sentido, el Banco Mundial (BM) desarrolla el denominado Índice de Capital Humano (ICH), que mide cuánto capital humano puede alcanzar un niño nacido hoy al llegar a los 18 años, considerando riesgos de salud y educación. Este índice, que se expresa en una escala de 0 a 1, establece el valor máximo únicamente si el niño puede gozar de plena salud, sin retraso en el crecimiento y con una expectativa mínima de vida de 60 años, y acceder a 14 años de educación formal de calidad.
En los últimos años, Paraguay lleva construyendo las bases de un mercado de capitales moderno, pero las reformas aprobadas por el Banco Central del Paraguay (BCP) en diciembre de 2024 marcan un punto de inflexión. Ese mes, la autoridad monetaria actualizó las reglas de emisión, custodia y negociación de títulos soberanos en guaraníes y amplió los límites para operar divisas y coberturas cambiarias con inversionistas extranjeros. Con ello, el país se integró a un grupo aún reducido de economías emergentes que facilitan la entrada de capital foráneo directamente en bonos locales, refiere un documento del Banco Mundial (BM).
Para el año fiscal 2025 el Banco Mundial (BM) clasifica a los países en función de su ingreso nacional bruto (INB) per cápita, calculado mediante el método Atlas, con base en los datos de 2023. Las economías de ingreso bajo son aquellas con un INB per cápita de 1.145 dólares o menos.
El nuevo índice del Banco Mundial (BM) reemplaza al Doing Business y posiciona a Paraguay en la mitad baja del ranking, con desafíos en servicios públicos y oportunidades para mejorar la eficiencia regulatoria y operativa.
En su última edición del informe de Perspectivas económicas, el Banco Mundial ha elevado su estimación para la economía paraguaya que se posiciona entre las de mayor expansión en la región. El organismo advirtió también que la economía mundial se encamina a su ritmo más lento de crecimiento desde el 2008.