22 de mayo de 2025
El pasado 30 de marzo, la Gobernación del Alto Paraguay declaró el estado de emergencia en el departamento, tras las torrenciales lluvias que inundaron cientos de kilómetros de caminos y dejaron aisladas a miles de familias. Tras esto, la Secretaría de Emergencia Nacional entregó 22 kilos de alimentos a cada familia el pasado 7 de abril. Los pobladores aguardan una segunda ayuda, atendiendo el difícil momento que pasan
La propuesta realizada por el Gobierno debe ser para todos los paraguayos, sin excepción alguna, porque numerosos compatriotas de esta región chaqueña continúan sufriendo el descuido, las penurias y, sobre todo, la pobreza social, dijo en parte de su homilía en este Domingo de Ramos, en la catedral de Fuerte Olimpo, el obispo del Chaco, monseñor Gabriel Escobar, haciendo también alusión al aislamiento en el que se encuentran numerosas familias del Alto Paraguay.
El Alto Paraguay sigue marginado en gran medida de las políticas de vialidad, como si sus 22.000 habitantes no tuvieran derecho a desplazarse de un municipio a otro utilizando caminos transitables en todo tiempo. Es que el plan de empedrar o asfaltar mil kilómetros de vías públicas en todo el país -a ser financiado por Itaipú Binacional con cien millones de dólares- solo abarca en dicho departamento las zonas urbanas, que son muy pequeñas; su territorio de 82.349 kilómetros cuadrados carece de rutas asfaltadas, salvo el tramo del Corredor Bioceánico que cruza su extremo sur, lo que obviamente genera serias dificultades para la actividad económica y hasta para el traslado de pacientes en ambulancias, pues quedan atascadas luego de un simple aguacero. En noviembre de 2023, Santiago Peña dijo que Fuerte Olimpo aún distaba 140 kilómetros del asfalto, por lo que se iba a generar la inversión necesaria para seguir desarrollando la zona: el emprendimiento comentado, restringido a los cascos urbanos, no servirá para el efecto.
Tras la iniciativa de ganaderos del departamento de sacar sus maquinarias para iniciar la reparación del camino en aquellos tramos destruidos por las aguas, ahora también hace lo propio la Gobernación, y desde el miércoles, el equipo vial está trabajando en el camino Olimpo – Toro Pampa. El desafío es posibilitar una vía de salida hacia el río Paraguay a los pobladores de comunidades de Chaco adentro.
Ante la imperiosa necesidad de contar con caminos transitables, con el objetivo de trasladar los animales hacia los frigoríficos, los productores de este departamento chaqueño comenzaron a trabajar en la reparación de aquellos tramos que ya fueron liberados de las aguas. En tanto, en la zona de Agua Dulce, el trabajo es intenso, en procura de rehabilitar por completo este camino, que les permitirá el ingreso de las maquinarias cosechadoras para iniciar la cosecha de unas 40 mil hectáreas de granos.
Las torrenciales lluvias que azotaron a este departamento chaqueño produjeron inundaciones en los caminos y en los campos ganaderos. El aislamiento de varias comunidades hace disminuir los trabajos en las estancias de la zona. A sabiendas de que el rubro de la ganadería es la principal y única actividad económica de la región, se genera una crisis económica que afecta a varias familias que dependen del trabajo en los establecimientos ganaderos.