El cartismo y sus aliados no lograron reunir los 23 votos que se requerían para sancionar la versión de la Cámara de Senadores que pretendía blanquear el puenteo a la Contraloría General de la República.
La intensión era aprobar la modificación del Código de Organización Judicial, en cuya versión de la Cámara Alta habilita a los entes públicos a evitar la fiscalización de la Contraloría, sin necesidad incluso de contar con acciones de inconstitucionalidad.
De esta manera, intendentes, gobernadores y administradores de entes públicos podrán recurrir directamente al Tribunal de Cuentas para eludir el control.
Con respecto a esta intención, el Contralor de la República, Camilo Benítez, señaló que sería un retroceso enorme en la política y la estrategia anticorrupción para el Paraguay.
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Seguido comentó: “Hay muchas acciones de inconstitucionalidad que hacen muchos intendentes, gobernadores e inclusive autoridades del gobierno central, que les permite remitir sus documentaciones de su ejecución del presupuesto al Tribunal de Cuentas”.
“Eso, en la práctica, si bien la Corte dice que ambas instituciones deben coexistir, en la práctica no ocurre. Cuando la Contraloría va a un lugar a auditar, la excusa es, ya enviamos al Tribunal de Cuentas la documentación y eso obstruye nuestra investigación”, explicó el contralor.
Sobre la propuesta de ampliación de los Tribunales de cuenta, Camilo Benítez señaló que le parece una idea superimportante, oportuna y necesaria, porque son apenas dos salas para todo el Estado Paraguayo.
“La propuesta de la senadora Rocío Vallejo era que existan más salas, pero solo para juicios contenciosos administrativos. Esto significa que cuando hay una decisión administrativa del Estado Paraguayo y uno quiere apelar, se va al Tribunal de Cuentas”, comentó.
En otro momento remarcó: “Si se llega a promulgar esta ley, inclusive, aquellas instituciones, como por ejemplo, la propia Corte, tendrán que volver a accionar contra esta ley, porque todas esas acciones previas van a perder entidad o vigor, porque va a haber una nueva ley”.
“Yo celebro muchísimo que el Congreso no hay aprobado esa versión del senador. Es más, creo que los senadores no son conscientes de la implicancia que tendría esta ley”, concluyo.